Teherán va a enviar a Kiev las cajas negras del avión de Ukraine International Airlines (UIA) derribado por error en Irán con 176 personas a bordo, según anunció este sábado la Organización de la Aviación Civil de este país.

El director general de la Junta de Investigación de Accidentes de la Organización, Hasan Rezaifar, explicó que a petición de las autoridades ucranianas las cajas negras “no se leerán en Irán, sino que se transferirán a Ucrania para su análisis”.

El pasado 15 de enero, la Fiscalía General de Ucrania y el Servicio de Seguridad del país pidieron a Irán la entrega de las cajas negras para asegurar su descodificación “adecuada” y para “preservar las pruebas”.

Por su parte, el Gobierno canadiense demandó el viernes a las autoridades iraníes que indemnicen a las de las  176 víctimas del siniestro, ocurrido el pasado día 8, y abogó por enviar las cajas negras a Francia o al propio Canadá.

En la tragedia del Boeing 737 de UIA murieron 82 iraníes, 57 canadienses y 29 personas que residían en el país norteamericano, y once ucranianos, entre otras nacionalidades.

Esta catástrofe coincidió con un aumento de las tensiones entre Teherán y Washington tras el asesinato en un bombardeo estadounidense del general iraní Qasem Soleimaní y el posterior ataque de Irán a una base en Irak con tropas norteamericanas.

Al respecto, el presidente Donald Trump la noche del viernes, durante una cena privada de recaudación de fondos para su campaña de reelección electoral, dio detalles del ataque estadounidense que terminó con la muerte del comandante Soleimaní junto al teniente iraquí Abu Mehdi al Muhandi.

Trump describió minuto a minuto el ataque basado en una cuenta regresiva anónima de la operación, de acuerdo con grabaciones obtenidas por The Washigton Post y CNN.

“Están en el auto, están en un vehículo blindado. Señor, tienen aproximadamente un minuto de vida, señor. 30 segundos. 10, 9, 8 ...”, narró Trump durante la cena. “Entonces, de repente, boom”, continuó. “Se han ido, señor. Cortando”, contó el presidente sobre aquel momento.

El asesinato de Soleimaní llevó a la Guardia Revolucionaria iraní a atacar con misiles el 8 de enero una base militar en Irak con presencia de tropas estadounidenses. Varios soldados de Estados Unidos resultaron heridos en el bombardeo.

Las tensiones no bajan y ayer Trump advirtió al líder supremo de Irán, Alí Jameneí, que “sea muy cuidadoso” con las “palabras”, tras las críticas vertidas contra Estados Unidos en un poco habitual discurso público en Teherán, el pasado viernes.