Tito Manjarrez, quien el lunes renunció a la presidencia de El Nacional, afirmó que “decidí retirarme al ver que no podía rendir al 100%, que no podía ser el aporte que necesitaba el club”.

El exmandatario de los puros criollos agregó que su decisión fue analizada durante mucho tiempo y que el no concretar la búsqueda de socios estratégicos en el país, México y España, le impulsó a dejar su cargo.

Sobre las críticas de deudas al plantel profesional y al personal administrativo, señaló que “el primer equipo está pagado hasta febrero, queda pendiente marzo, es una mentira que estamos impagos cuatro meses. A los empleados administrativos se adeuda dos meses, en esta administración el club no fue suspendido o sancionado con resta de puntos”.

Destacó que bajó el déficit de $ 6,3 millones a $ 3 millones, que deja solucionado “en el papel” el tema de deudas con el Servicio de Rentas Internas, y que la auditoría realizada a las administraciones del club, incluida la de 2018, está terminada y sus resultados darán a conocer la complicada situación económica de El Nacional.

Del futuro del Bitri espera que mejore su situación pero que para esto se necesita un cambio en el modelo de gestión con gente “que le quiera al club, con dinero de buen origen, con honestidad”.

Luis Lara, quien quedó como presidente encargado de El Nacional, indicó que en los próximos días se desarrollará una asamblea extraordinaria para decidir si se instala un directorio transitorio o se convoca a elecciones, esta última tomaría cerca de tres meses.