Pasado el mediodía los enfrentamientos volvieron a los exteriores de la Asamblea y la Contraloría que el gobierno permitió al movimiento indígena ocupar como un gesto de buena voluntad para impulsar el diálogo. 

Las detonaciones se escucharon desde distintos puntos de la ciudad. El libreto es el mismo. Los manifestantes provocan a la Policía que responde con gas lacrimógeno. Este viernes 24 de junio de 2022, los indígenas armaron barricadas para protegerse y armar los voladores que lanzan contra la Policía.

Esos voladores, según las investigaciones de la Policía, no solo contienen pólvora. También tienen vidrios y otros elementos que, a un policía de la Unidad de Mantenimiento del Orden (UMO) casi le provocan la pérdida de su pierna.

Los manifestantes tienen apoyo logístico de sus compañeros que les asisten cuando la munición se le termina. También agitan unos recipientes plásticos que lanzan contra la Policía que les responden con bombas lacrimógenas. 

Este viernes, la palabra médico, es la qué más gritan los manifestantes que están en la primera fila, enfrentando a los policías. Hay asfixiados, en su mayoría a quienes estudiantes de Medicina y paramédicos socorren de inmediato. Otros manifestantes cortan árboles para armar fogatas que les protejan del gas lacrimógeno. El ambiente de agresión en medio de las protestas se ha elevado más en las últimas horas en contra de los que ellos consideran infiltrados.