Nuestra Señora del Pilar, así se denomina el nuevo santuario católico que en mayo abrirá sus puertas a toda la feligresía católica de la provincia de Santa Elena y del país. La majestuosa casa de oración está ubicada en la cima del cerro más alto, en la comunidad de Libertador Bolívar, al norte de la Península.

En el lugar se rendirá tributo a la Santísima Virgen del Pilar, patrona de la comuna. Asimismo, se venerará a Narcisa de Jesús. El santuario fue un anhelo de los devotos que venían solicitando un nuevo local para adorar a la madre de Dios.

“La capilla del pueblo resultó pequeña para recibir a los seguidores de María, por eso se decidió gestionar un nuevo templo. Se acudió a diversas instituciones para que ayuden en la construcción, también quienes vivimos aquí apoyamos económicamente para que el santuario sea una realidad”, dice Gustavo Suárez, poblador.

El Municipio de Santa Elena fue uno de los entes que aportó para la construcción de la obra, que cuenta con una extensa explanada en donde los visitantes podrán espectar todo el perfil costero del área. Además, se encargó de asfaltar la vía de acceso, para que de esta manera los devotos puedan llegar con sus vehículos hasta al pie del santuario.

“La ubicación geográfica donde se ha construido es la más idónea, de aquí podemos divisar todo el maravilloso entorno natural que tenemos. Esta obra es un aporte a la actividad religiosa y turística del cantón”, relata el alcalde de Santa Elena, Luis Segovia.

Para el viernes 28 de abril de 2023 se tiene prevista la inauguración del nuevo santuario.

Existe una gran expectativa por parte de la comunidad religiosa católica en su apertura. Se estima que el lugar será visitado por miles de devotos.

La advocación de la Virgen del Pilar tiene como fecha de celebración el 12 de octubre.

La historia de la Iglesia católica recoge como antigua tradición, cuando el apóstol Santiago llegó a la península ibérica (España) para predicar el Evangelio; allí se le apareció la Virgen María, de pie, encima de un pilar o columna. Aquel encuentro es el origen de una de las devociones más extendidas que hay en la Iglesia católica: la advocación a Nuestra Señora del Pilar.

En Libertador Bolívar la veneración data más de un siglo, según datos del Cabildo comunal fue en la primera década de los años 1900 en que empezó la tradición. Los pocos pobladores que en ese entonces habitaban el recinto Atravesado (hoy Libertador Bolívar) recibieron la primera imagen que la donó un viajero y la ubicaron en la iglesia Santa Cruz.

En los escritos constan datos de los primeros lugareños, quienes narraban que la imagen era milagrosa, por eso el 12 de octubre de cada año se le realiza su tradicional fiesta, en donde toda la población participa en los actos religiosos y sociales que se preparan.