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“Hay que despojarnos del lenguaje del orgullo”

Estamos cosechando un descontento social, que ya no solo nos empobrece como seres pensantes, sino que también nos hace más violentos e inhumanos. Deberíamos estimular otros caminos más liberadores y equitativos, donde no hubiese tanto sentimiento de superioridad. Sin duda, deberíamos cuestionarnos mucho más nuestra forma de proceder ante las fragilidades humanas. Está muy bien luchar contra la corrupción, prestar mejores servicios y responder a las demandas de los ciudadanos, pero si en verdad queremos promover una cultura de integridad que nos globalice, hemos de despojarnos del lenguaje del orgullo para poder adentrarnos en la humildad. Compartir siempre reduce la carga.

Víctor Corcoba Herrero