“No solo cadenas de oracion”
Ante tanto desastre de la tierra provocado por diferentes fenómenos naturales, es imprescindible hacer énfasis en que la furia de la naturaleza no es sino de su Hacedor. ‘Quién es este que los vientos y mares le obedecen” sentencia una frase bíblica (Mateo 8:26). Por tanto es necesario llamar a reflexión. Desechemos toda perversión, malos deseos, odios, envidia, etc.
Meditemos e imploremos una oración ferviente por nuestros hermanos azotados y por la protección nuestra, pero recordemos que de nada sirve hacer cadenas de oración por evitar desgracias si nuestras acciones no están siendo agradables a los ojos del Todopoderoso.
Francisco Rosario