En alusión a lo afirmado por el señor Richard Espinosa, presidente del IESS, en cuanto que la institución no sufre carencia de medicamentos, debo informarle que el pasado 4 de octubre tuve una cita médica de control debido a una enfermedad que padezco. ¿Cuál fue mi sorpresa? Que luego de recibir el chequeo médico, al momento de recetarme me comunicó que no podía prescribirme uno de los medicamentos que requería mi tratamiento por cuanto el sistema le arrojaba que no había en farmacia, por lo que debería comprarlo. Por esta razón, urge que el señor Espinosa disponga a quien tenga la responsabilidad de dotar de medicamentos a la institución lo haga con la debida anticipación para que estos no se agoten tan rápidamente como aparecen y que sus respuestas no sigan siendo “No hay”.

Si, yo, sin dejar de tomar mis medicamentos porque afortunadamente puedo comprarlos, ¿cómo estarán los pacientes que dependen que el IESS les suministre sus medicinas, lo que es peor cómo estarán aquellos pacientes que padecen de enfermedades crónicas y terminales y que no se medican como debe ser, por falta de recursos para comprar sus medicinas y que sus enfermedades no empeoren, y en último de los casos evitar la muerte?

Eco. Mario Vargas Ochoa