El Gobierno de Ecuador expresó este jueves 5 de octubre su profundo pesar y se solidarizó con las familias de los trece fallecidos en el incendio del pasado domingo en tres discotecas de Murcia (España), entre los que hay aparentemente cinco ecuatorianos.

Cuatro días después del suceso, el Ministerio de Relaciones Exteriores y Movilidad Humana de Ecuador emitió un comunicado donde lamentó los hechos y señaló que hasta ahora el Consulado de Ecuador en Murcia "no ha recibido aún información oficial adicional sobre la identidad de las víctimas".

La delegación consular ecuatoriana en Murcia "está en permanente contacto con las autoridades locales a fin de obtener mayores detalles" y espera "tener confirmación de la identidad de las víctimas entre el 12 y 13 de octubre".

Entre los trece fallecidos hay tres colombianos, cinco nicaragüenses y al parecer otros tantos de Ecuador, según confirmaron el miércoles a fuentes oficiales, aunque no pudieron precisar la cifra de estos últimos porque aún se están realizando las tareas de identificación.

A la espera de confirmación, todos los ecuatorianos fallecidos en el incendio estarían afincados desde hace varios años en España. Entre ellos, un español de origen ecuatoriano.

El siniestro, que dejó también 24 heridos, comenzó en uno de los locales del complejo de las Atalayas, una popular zona de Murcia, donde comparten espacio decenas de discotecas, locales de comida rápida y clubes nocturnos, sin que de momento se conozca el origen exacto del incendio.

Las llamas se extendieron rápidamente a las dos discotecas anexas, una de ellas frecuentada por la comunidad latina, en un momento en el que todavía quedaba gente disfrutando de una noche de fiesta con amigos.

Dos de las discotecas implicadas en el incendio no tenían licencia municipal y sobre ellas había una orden de cese de actividad desde enero de 2022.

Los restos de los fallecidos aún no fueron entregados a sus familias, aunque ya se realizaron todas las autopsias y se cotejarán con el ADN aportado por sus allegados en el Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses en Madrid.

El Gobierno regional de Murcia gestiona desde el miércoles la llegada a España desde Francia, Ecuador y Nicaragua de cinco familiares de las víctimas.