Desde hace tres días la Fiscalía abrió una investigación previa al presidente de la República Guillermo Lasso Mendoza. El presunto delito es el de posible defraudación tributaria. El origen del expediente es la denuncia presentada el pasado 6 de octubre por el excandidato presidencial Yaku Pérez. 

Ese día el dirigente indígena y exprefecto del Azuay Pérez llegó a la Fiscalía, en Quito, a dejar la denuncia en compañía del legislador Bruno Segovia (exPachacutik). 

En declaraciones a la prensa el parlamentario indicó que el mandatario "ha aceptado que evadió impuestos, porque dice que tenía dinero en paraísos fiscales y no pagó impuestos antes de la última candidatura”.

El nombre del presidente Lasso apareció en la filtración de alrededor de 12 millones de documentos analizados desde hace dos años por el Consorcio Internacional de Periodistas y publicados en varios medios en el caso 'Pandora Papers'.

Publicación que para Pérez “nos da vergüenza a los ecuatorianos de tener al Primer Mandatario ecuatoriano como entre las primeras figuras de líderes mundiales, pero de evasores de impuestos”.

El excandidato justificó que la Constitución dispone que es un deber de los ecuatorianos denunciar los actos de corrupción. "En tal virtud, lo menos que podemos hacer es ir a esta Fiscalía para presentar un denuncia y que se abra un proceso de investigación para que la Fiscalía pida al Servicio de Rentas Internas todos los movimientos financieros, los pagos y los impuestos", señaló. Dijo además que el pedido debía extenderse a sus familiares y más cercanos, desde 2013.

En sus redes sociales el presidente divulgó la información alusiva a la publicación periodística y dijo que no era un evasor de impuestos. Mencionó que desde 2005 hasta 2020 pagó alrededor de 588 millones de dólares por concepto de sus impuestos personales y de sus empresas.