Se cumple un mes del asesinato del excandidato presidencial Fernando Villavicencio ocurrido a la salida de un mitin en el norte de Quito. La investigación que debía cerrarse este fin de semana se prolongará por un mes más.

¿La razón? Hay al menos seis posibles sospechosos que se sumarán a la lista de procesados por el sicariato del político, periodista y activista. Cuatro están cumpliendo detenciones en las cárceles de Cotopaxi y en el Centro de Privación de la Libertad El Inca de Quito. Además, hay al menos dos mujeres que fueron detenidas en allanamientos en el sur de la capital.

De los autores intelectuales aún no hay rastros. Christian Zurita, quien reemplazó a Villavicencio en las elecciones presidenciales del pasado 20 de agosto en las que quedó en tercer lugar con más del 16 % de votos, recordó en un homenaje realizado en la Unión Nacional de Periodistas (UNP) el legado que dejó el exasambleísta. (LEA TAMBIÉN: "Revolución Ciudadana pide a la Fiscalía avances en el caso Villavicencio")

El excandidato del Movimiento Construye consideró que el caso no debe quedar en la impunidad y volvió a dirigir las acusaciones hacia la Policía por presuntos errores y omisiones en lo que concluyó con el asesinato del exasambleísta.

Plan de asesinato

1. Según Christian Zurita, la Policía Nacional tenía conocimiento de un presunto plan para acabar con la vida de Fernando Villavicencio. En el homenaje que se rindió al exasambleísta en la sede de la UNP contó el esquema que habrían estado involucrados dos de los sicarios que se encuentran detenidos actualmente y que la Policía no hizo nada. El ministro del Interior, Juan Zapata, dijo que Fiscalía está investigando todo y “seré respetuoso de aquello”.

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Omisión grave

2. La existencia del supuesto plan para matar a Villavicencio habría sido alertado por Antinarcóticos de la Policía en un informe analizado por esa entidad que, sin embargo, habría sido omitido, según las revelaciones que hizo el excandidato Christian Zurita.

Falla de Protocolos

3. En el caso del sicariato de Villavicencio aún quedan cabos sueltos que la Fiscalía aún no ha podido atar, al menos no se conocen mayores resultados de las investigación en la que también participan agentes del Buró Federal de Investigaciones (FBI) de Estados Unidos. Entre ellos se mencionan posibles fallas en los protocolos que debían brindar los miembros de la seguridad de Fernando Villavicencio el día que ocurrió el crimen. La viuda del político, Verónica Saráuz, señaló que están esperando los informes que emita la Comandancia de Policía para saber en concreto qué nivel de capacidades tenían los policías que estuvieron a cargo de la seguridad.

Vehículo blindado

4. Otro de los temas sin resolver en el caso de Villavicencio y que pudo haberle salvado la vida apunta al vehículo blindado en el que se movilizaba normalmente. Pero que el día del asesinato, el 9 de agosto, no estuvo listo en el acceso principal del sitio en el que se hizo el mitin. Aunque el conductor dio varias explicaciones, las dudas aún permanecen. Saráuz dice que también habrá que ver qué pasó que el carro blindado no estuvo en Quito.

Celular desaparecido.

5. El tío de Fernando Villavicencio, Galo Valencia, aseguró que, hasta la semana pasada, la Fiscalía no contaba todavía con el dispositivo electrónico (celular) que utilizaba Villavicencio el día de su asesinato y que debería ser explotado por la posible existencia de amenazas o comunicaciones que podrían llevar a los autores intelectuales del sicariato.

Delincuencia organizada

6. Inmediatamente después del asesinato circuló en redes sociales un vídeo en el que presuntos integrantes de la agrupación delincuencial Los Lobos se atribuían el asesinato de Villavicencio. Otros, supuestos miembros de la organización los desmintieron. Entre los nuevos sospechosos del crimen están cuatro reos. El que está recluido en la cárcel de El Inca ha sido señalado como cabecilla de un grupo delincuencial. Hay otro de nacionalidad colombiana, procesado por delincuencia organizada, tenencia de armas y receptación de objetos robados.

Autoconfianza

7. La autoconfianza de Fernando Villavicencio también se ha mencionado entre los factores que pudieron incidir en la facilidad que tuvieron los sicarios que habrían participado en el hecho delictivo del 9 de agosto pasado en la capital. Christian Zurita reconoció que su amigo era un ‘temerario’ porque no quería usar chaleco antibalas y Saráuz afirmó que su autoconfianza se dio por pensar que en Quito principalmente no le pasaría nada.

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