Editorial: Por fin retornamos a la paz

La paz ha vuelto al país luego de 12 días de protestas con la movilización indígena, en parte, y del vandalismo provocado por elementos infiltrados y delincuenciales que causaron asaltos y destrucción. Esta situación de normalidad se logró gracias al acuerdo al que llegaron las partes en el conflicto ya superado, los reclamantes y el gobierno.

Mediante tal acuerdo, que se dio a través de un diálogo directo entre el presidente Moreno y dirigentes indígenas, contando con la mediación de las Naciones Unidas y de la Iglesia Católica, se deja sin efecto el decreto 883 mediante el cual se suprimían los subsidios a los combustibles extra y diésel para, mediante un acuerdo, que se logra con la nueva comisión recién integrada, se permita focalizar los recursos logrados por la comercialización de los derivados del petróleo hacia los sectores más necesitados de nuestro país.

Es necesario, tras haber llegado a este acuerdo con los más altos niveles que conducen a la paz, iniciar una acción rehabilitadora y reparar los graves daños causados por el vandalismo, buscando recuperar los millones de dólares que el país ha perdido durante los días del conflicto, sin dejar de castigar también a los responsable de las muertes recientes.