La explicación en el comportamiento de jóvenes que deambulan por calles y que en ocasiones quedan inhibidos, como si durmieran de pie, está en la química de las sustancias que consumen para drogarse, explican especialistas en el tratamiento de adicciones.

Se trata de una situación grave, que carcome la salud pública, que ha sido poco atendida por las autoridades, sostiene la doctora Julieta Sagnay.

“A medida que fue pasando el tiempo, yo hacía pruebas de drogas y encontraba otro tipo de drogas dentro de la H, como la metanfetamina, drogas estimulantes, psicotrópicos, medicamentos para la circulación sanguínea”, relata Sagnay. Esos elementos han generado trastornos graves de adicción y en la salud mental de los individuos.

Hay medicina de uso delicado, que es usada como droga no terapéutica, que entra al país de contrabando, según fuentes.

Saddam Véliz, director de Control Posterior, de la Agencia Nacional de Regulación, Control y Vigilancia Sanitaria (Arcsa), cuenta que agentes del Servicio Nacional de Aduana del Ecuador (Senae) han identificado cargas ilegales de cientos de pastillas en zonas de frontera, como en el sur. Dichas pastillas son parte de las sustancias catalogadas por la ley como psicotrópicas o estupefacientes, que actúan sobre el sistema nervioso y el cerebro, generando cambios en el comportamiento, ánimo, pensamiento, percepción, etc.

“Se los utiliza para el corte de drogas. Aunque para dar volumen (aumentar la cantidad) se utilizan otras sustancias como la cafeína, paracetamol”, menciona el funcionario.

En el mercado local, explica Véliz, la Arcsa revisa los reportes que tienen que emitir las farmacias privadas sobre las ventas de medicamentos de uso delicado, que bien podrían ser usados para otros fines.

“Esos reportes tienen que remitirse a la Arcsa, por medio de una plataforma digital, con datos reales. En caso de que se dé un presunto desvío de este tipo de medicamentos, se procede a la debida denuncia, porque son drogas”, detalla el funcionario.

Sin embargo, el control se aplica de forma parcial. A nivel nacional funcionan unas 12 mil farmacias, pero la Arcsa solo tiene capacidad de poner la lupa a unas 500, cada mes. Los 100 analistas comprueban in situ la información reportada por esos negocios, con el cruce de datos con laboratorios y la revisión de las recetas que son retenidas a los clientes. Por ello, Véliz asegura que perfilan a las farmacias con mayor riesgo para someterlas a una fiscalización. En enero pasado, esa entidad registró el incumplimiento de la ley de 743 establecimientos, más de 200 que en enero del 2022.

La sanción es económica, de hasta cinco salarios básicos. En casos de reincidencia, la multa se duplica y los negocios podrían ser clausurados.

A las carencias del sistema para controlar a todos los establecimientos formales se suma la proliferación de lugares donde se comercializan ilegalmente ese tipo de sustancias, como sectores de la Bahía de Guayaquil u otros puntos poco conocidos para el ciudadano promedio.

Otras amenazas para la salud pública, sobre todo para la juventud, también tienen forma de pastilla, algunas parecen láminas, y son conocidas como éxtasis, LSD y anfetaminas, las denominadas drogas sintéticas. En una entrega pasada de este Diario se explicó que una gran parte es traficada por extranjeros que llegan por vía aérea al país, oculta en la ropa o en medio de fármacos.

En general, la cantidad de drogas decomisadas se ha reducido desde el 2019, como en el caso del éxtasis, cuando se incautaron 10 mil pastillas, versus las 350 del 2022, según la información que entregó la Policía.

“Producto de la coordinación de las instituciones policiales de los países, de la cooperación, se ha advertido y por eso se ha disminuido la incautación”, sostiene el oficial Pablo Ramírez, director general de Investigación Antidrogas.

No obstante, la detección de drogas sintéticas es más complicada, al tener un grupo objetivo de consumo, exclusivo, por su alto costo con relación a otras sustancias, dicen las fuentes consultadas. Por ende, es posible que hayan cantidades significativas en el mercado negro.

Un consumo de drogas arriesgado

El consumo de drogas terapéuticas y no terapéuticas provoca efectos en la salud del individuo. Sin embargo, el riesgo aumenta y puede ocasionar la muerte si la persona desconoce el origen de la sustancia que ingiere. Autoridades advierten que fármacos de contrabando podrían estar siendo elaborados con elementos nocivos, por la posibilidad de falsificación.