La producción nacional de leche en Ecuador bordea los 5,5 millones de litros al día. De acuerdo con datos de la Federación Panamericana de Lechería (Fepale), los ecuatorianos ingieren cerca de 114 litros de leche anualmente, cifra que se ha mantenido a la baja, más aún en relación con lo establecido por organismos internacionales como la Organización Mundial de la Salud (OMS), que recomienda consumir al menos 150 litros por persona al año.

Es una tendencia que sigue a la baja. Entre 2022 y 2023, el consumo de lácteos en Ecuador cayó un 12 %, según un estudio de Centro de la Industria Láctea (CIL Ecuador). La industria atribuye esta merma a una falta de educación nutricional, el desprestigio derivado de “estudios sesgados” y “con poca participación científica” que desestimula su consumo, a la informalidad del sector y la alta incidencia de la pobreza en zonas rurales, según CIL.

Pero a esto, en estos últimos meses se le suma el problema de la inseguridad. “Hay muchas tiendas de barrio que se han cerrado, porque no pueden seguir pagando extorsiones (vacunas) y ello también hace que se venda menos leche”, indicó a Diario EXPRESO la comerciante al por mayor Lucía Mayorga.

Los vendedores de los lácteos en el mercado de mayoristas, en Guayaquil, en Montebello, destacaron que ahora que terminan las clases en la región Costa la baja podría ser mayor, esta podría llegar hasta un 50 %. “Por día perdemos unos 75 dólares por la leche que no se vende, al mes significa unos 2.100 dólares y es un alimento que se bota, porque ya sobrepasó la fecha para consumir”, detalla el comerciante Byron Villa.

El problema se vuelve una bola de nieve. Si hay menos ventas en volumen (por decrecimiento de la demanda) se genera una sobreproducción y se estimula el mercado informal de leche de mala calidad y con bajos precios, la cual no cumple con estándares de inocuidad y perjudica la imagen de otros productos que sí se elaboran de manera tecnificada y con óptima calidad. “Incluso esta leche de baja calidad puede ser perjudicial para el consumo de las personas”, dijo a EXPRESO Verónica Chávez, directora ejecutiva de CIL.

Chávez agregó que hay riesgo de pérdida de empleo formal y una afectación a todos los eslabones de la cadena de un sector que ha sido resiliente para sostenerse en el tiempo. Al momento, CIL señaló que no cuentan con datos específicos sobre cuántos productores han quebrado. Sin embargo, Chávez destacó, que más allá de que sean empresas grandes o pequeñas, todo el sector ha sido afectado por una caída de demanda de leche y derivados y por la penetración de la informalidad.

• PARA SABER. 

Consumo. Del total de productos lácteos que cada persona consume en Ecuador, los porcentajes se manifiestan de la siguiente manera, según datos de Fepale. Queso: 15,6 % por persona; yogur: 9,1 %; leche líquida: 50,3 %; leche en polvo: 12,7 %; otros (bebidas lácteas, evaporada, condensada, etc.): 12,3 %.

Trabajo. En Ecuador, el sector lechero garantiza la soberanía alimentaria y aporta al desempeño socioeconómico nacional, generando ingresos para más de 1,5 millones de personas tanto directa como indirecta, y contribuyendo con un 6,4 % al PIB agropecuario y con cerca de un 0,6 % al PIB nacional, según cifras del Banco Central.

Precio. El precio de la leche en Ecuador es uno de los más altos de la región, ya que a pie de finca se paga 0,52 dólares en comparación de otros países de Latinoamérica que se paga 0,30 a 0,46 dólares, según CIL. Aunque según los productores, por falta de un reglamento no les pagan en las fincas como se debe.

• Sin reglas, menos paga por litro

El sector de la leche no solo está golpeado por el bajo consumo del alimento, sino por los bajos precios. Han pasado 18 meses y todavía el Gobierno no ha emitido el reglamento sobre el precio mínimo de sustentación que se le debe cancelar al productor en su finca. El costo debe ser por encima de los 0,50 dólares y les dan entre 0,38 y 0,42 dólares, explicó a Diario EXPRESO Francisco Chiriboga, presidente de la Cámara de Agricultura de la I zona.

Agregó que no se tiene la cifra exacta de cuántos productores han quebrado, “pero se intuye que ha pasado, porque antes la producción diaria de leche en el país era de más de 6 millones de litros; ahora son 5,4 millones de litros”.

• Más demanda de queso maduro

La categoría de quesos maduros y semimaduros ha alcanzado un 32 % del consumo nacional. Kantar señala que en el último trimestre de 2023 el consumo incrementó en un 9 %.

Esteban Montenegro, jefe de mercadeo de Alpina Ecuador, explicó que de acuerdo a un estudio de Ipsos consumen quesos semimaduros en sánduches, pastas, sopa y como snack.

El queso es el snack que se prefiere cuando se toma vino, cuyo consumo también ha crecido en el país al existir en el mercado vinos de buena calidad y a bajos precios, por el acuerdo con la Unión Europea.

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