Menos envíos a China debilitan la facturación de la exportación de camarón

El año no arrancó bien para la industria camaronera, la primera fuente de divisas del país a través de sus exportaciones. Hasta marzo, el sector logró vender al mundo 600'611.208  de libras, una caída del 16,84 %, si se compara esa cifra con los volúmenes enviados en igual periodo del año pasado. Un resultado que derivó en un 8 % menos de ingresos ($ 1.345'099.541). China, su principal comprador, presionó ese resultado. 

Según las cifras de la Cámara Nacional de Acuacultura (CNA), durante el primer trimestre del año, el gigante asiático demandó un 26,76 % menos del producto (306'141.123 de libras). Eso, sumado a un declive global de precios, hizo que los ingresos se desplomaran en casi un 40 %. 

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José Antonio Camposano, director de la CNA, atribuye el resultado a una primera causa: el enfriamiento de la economía china, que ha hecho que las compras asiáticas sean menores. "Ya esas señales las venimos palpando a lo largo de los últimos 18 meses. Y lo que quiere decir es que el mercado chino no puede rotar con la misma velocidad de inventario con la capacidad que Ecuador y otros países tienen para enviar camarón a ese mercado". 

Otro de los motivos, y no menos importante, anota, es el castigo impuesto por la Administración General de Aduanas de China  en febrero de este año a nueve exportadoras locales (entre grandes y pequeñas) debido a los niveles de uso de preservantes, no permitidos en su norma. El tema, dijo, ya ha sido aclarado y aún se espera que dicho país levante la medida de suspensión. 

"El comercio de camarón, que demanda de 45 a 60 días de tránsito para llegar a China, requiere, así como también se usa en la Unión Europea y otros destinos, de un preservante que hace el producto se mantenga con calidad óptima para llegar a las perchas. China había detectado valores por encima de su norma, pero cabe aclarar que este país tiene el nivel de exigencia más alto en el mundo para este producto. En Europa el valor (permitido) es más alto, frente al del país asiático". Este problema hizo que las ventas solo en marzo de este año cayeran un 40 %, comparado con igual mes del 2023. 

Una caída de precios que se mantiene

Si bien los pedidos de Estados Unidos y Europa crecieron de enero a marzo, la demanda no fue suficiente para frenar la caída de la facturación total. Esto, debido a la caída de precios, una tendencia que inició a finales de 2022 y que se mantiene este año. 

Según la CNA, las ventas a EE.UU. sumaron 136'521.149 libras, si bien eso significó un aumento del 34 % del volumen enviado, la facturación retrocedió un 27,45 %. En el caso del mercado europeo, ese problema se asentúa, los envíos crecieron un 20,47 % (113'052.951 millones), pero a cambio recibió apenas un 6,87 % más en divisas. 

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