La Junta de Política y Regulación Monetaria y Financiera formuló, hace escasos cuatro días, modificaciones a la normativa que rige para el trabajo de los depósitos de compensación y liquidación de valores. Esto le fue comunicado al superintendente de Compañías, Víctor Anchundia.

Se trata de una reforma a las “disposiciones generales del capítulo relacionado a la constitución, autorización de funcionamiento e inscripción en el catastro público del mercado de valores de los depósitos centralizados de compensación y liquidación de valores”.

Ahora los depósitos centralizados, dos en Ecuador, el Decevale privado (tiene como accionistas a las bolsas de valores de Quito y Guayaquil, principalmente) y el DCV-BCE público, deberán confirmar a través de los depositantes directos la identidad de los titulares de las subcuentas, y su disponibilidad de valores y de dinero.

Con esto se trata de evitar problemas como el caso Isspol (Instituto de Seguridad Social de la Policía), emblemático porque en algunas de las más grandes operaciones por 732 millones de dólares, el Decevale incumplió normativas al aceptar y compensar operaciones por valores que no estaban registrados en el Catastro Público de Mercado de Valores.

“La compensación será realizada con la liquidación de la operación de compraventa de valores que reciba de la bolsa de valores”. Además, los depósitos centralizados de compensación y liquidación de valores deberán “verificar la existencia de los recursos dinerarios con los que se efectúa el pago de la compraventa de valores inscritos en el Catastro Público del Mercado de Valores realizada a través del mercado bursátil”.

La compensación se efectuará a través del cruce y registro de las diferentes transacciones en las cuentas de la contraparte, que finalmente llevará a la determinación de los saldos de las respectivas cuentas.

Otro punto relevante dispuesto por la Junta de Política y Regulación es el relacionado con la liquidación de las transferencias de valores provenientes de una operación de compraventa de valores hecha en el mercado bursátil, la cual se efectuará de acuerdo con la liquidación expedida por la correspondiente bolsa de valores, una vez que se haya “verificado la disponibilidad de valores y dinero”.

En el plazo de un mes los depósitos centralizados de compensación y liquidación de valores deberán realizar las reformas correspondientes a sus reglamentos internos y manuales operativos. Estos deberán ser presentados a la Superintendencia de Compañías con su respectivo registro en el Catastro Público, hasta el 21 de enero de 2021.

No genera comisión la apertura de la subcuenta para el registro de la transferencia que provenga de una dación en pago. La casa de valores únicamente podrá cobrar los costos operativos propios que genere la gestión de apertura, precisa la resolución. 

Estos son los cinco puntos de autorregulación impuestos por los accionistas al nuevo directorio del Decevale.

1. Los accionistas del Depósito Centralizado de Compensación y Liquidación de Valores (Decevale) se han impuesto nuevas reglas.
2. No habrá ninguna relación directa entre las directivas de las bolsas y las del Decevale: aislamiento e independencia de gestión.
3. Configuración de procesos gestionados bajo integración de funciones, automatización, innovación y cadena de comprobación.
4. El Decevale tenderá a contar, en el corto plazo, con un gobierno corporativo integral que lo consolide en el ámbito de gestión de productos que devuelvan la confianza del mercado.
5. El ente no girará en torno a una sola persona, con lo que cualquier funcionario y sus relaciones o experiencia pasada no tendrán substancia. Se fortalecerá y desarrollará con base en la experiencia vivida, y empresarios, consultores.