En un contexto de inflación económica global, de aumento en las tasas de interés y la pérdida de poder adquisitivo del consumidor, los países también deben hallar oportunidades para crecer. Y entre esas opciones, en Latinoamérica, las telecomunicaciones deben ser vistas como un canal clave  para lograrlo. 

Así lo expuso Daniel Hajj, Director General de América Móvil, durante la sesión inaugural del Mobile360 Latin América de la GSMA (Organización Mundial de Telecomunicaciones Móviles y Conectividad), y el Consejo Latinoamericano de Transformación Digital (CLDT) que se llevaron a cabo hace algunos días en ciudad de México. 

El confinamiento provocado por la COVID-19, recordó, apagó en el 2020 el switch de la economía, pero prendió otro: el de la tecnología digital, con la que, desde ese año, los países vienen aprovechando de mejor manera las soluciones tecnológicas digitales, como respuesta al actual entorno. A nivel mundial, enfatizó,  se tuvieron 300 millones de sesiones de Zoom por día; las ventas en línea aumentaron 50% en tan solo dos años; mientras que el 70% de las pequeñas y medianas empresas incrementaron el uso de tecnologías digitales tras la COVID.

“Podemos afirmar que este periodo representa un parteaguas, no sólo en las telecomunicaciones, sino en los instrumentos para alcanzar el desarrollo en general. Es momento de oportunidades”, dijo.

Hajj destaca que la infraestructura de las telecomunicaciones ha estado a la altura de los retos globales, ya que en lo últimos 10 años se ha realizado inversiones sin precedentes, permitiendo que el Internet fijo aumente su velocidad más de 200 veces, pero manteniendo su nivel de precios.

No obstante, admitió que a nivel mundial aún se requiere una significativa inversión en el sector para lograr una infraestructura más resiliente, con mayor disponibilidad del espectro evitando altos costos que afectan la accesibilidad; el lograr el acceso a los dispositivos inteligentes a precios adecuados y el tener un marco impositivo que impulse la cobertura y la accesibilidad de las personas a los servicios.

El principal de América Móvil puso a su empresa como ejemplo. Ellos, dijo, están conscientes de la importancia estratégica de las telecomunicaciones y de la responsabilidad que tiene la empresa como uno de los principales operadores a nivel mundial. Por ello, “a lo largo del tiempo nos hemos transformado, innovado y hemos respondido a los desafíos de cada momento”. 

La firma, que tiene presencia en 23 países, registra 381 millones de accesos, más de un millón de kilómetros de fibra óptica, 32 datacenters, 25.000 kilómetros en cable submarinos y cinco satélites. 

El ejecutivo contó que siguen en su esfuerzo por robustecer la infraestructura que tiene como fin expandir la cobertura. Un blanco es avanzar con la tecnología 5G, que permita impulsar ambientes digitales e intensificar los servicios en la nube, "para que nadie se quede al margen del desarrollo, lo que implica que ninguna persona se quede sin conectividad".