El fin de semana el presidente de Ecuador, Gillermo Lasso, con su homólogo de la República Popular de China, Xi Jinping, llegaron a un acuerdo en el Memorando de Entendimiento para la firma de un Tratado de Libre Comercio China.

Para el sector bananero ecuatoriano, la firma de un Acuerdo Comercial con China será la diferencia entre ser un proveedor principal o convertir en un proveedor marginal sin ese Acuerdo, dijo a Diario EXPRESO José Antonio Hidalgo, director ejecutivo de la Asociación de Exportadores de Banano del Ecuador (AEBE).

Hidalgo destacó que los datos de la llegada de banano a China divulgados por Trademap, dan cuenta que en los últimos dos años: 2020 y 2021, la llegada de banano ecuatoriano ha disminuido notablemente.

• Hasta el 2019, el Ecuador era el segundo proveedor de esta fruta en China detrás de Filipinas. En el 2019, de cada 100 toneladas, una cuarta parte provenían desde nuestro país.

• En el 2021 fue el cuarto proveedor dejando espacio a Vietnam y Camboya. En el 2021, la presencia llegó a un poco más de una décima parte y eso es mucho, ya que significa una pérdida de presencia de más del 50 % en veinticuatro meses.

A lo anteriormente mencionado agregó otro hecho y es que por el momento, el banano ecuatoriano se enfrenta a una dura competencia con sus similares de Vietnam, Camboya y Laos (en orden de importancia). En el 2019, estos tres países representaban un 20 % del banano importado, al finalizar el 2021 esa presencia supera el 40 %, con dos características: están cerca de China y envían su banano por vía terrestre, lo cual les evita toda la tramitología que significa un embarque naviero, con lo cual ellos están a días y el banano ecuatoriano está a semanas, y segundo, hay inversión china en esos países, especialmente en Camboya y Laos.

Además, con el actual arancel de 10 %, el banano ecuatoriano es 5 centavos de dólar más caro al momento de ingresar a China en comparación a los otros tres países mencionados. "Por lo que firmar un Acuerdo, nos pondría en una igualdad de condición arancelaria y con la calidad que se tiene, podemos recuperar ese espacio perdido en los años de pandemia. China está recuperando el volumen de importación anual de banano", indicó Hidalgo.

Reiteró que sin el acuerdo, la actual presencia puede reducirse aún más. Por otra parte, con un acuerdo, se puede consolidar la presencia del banano ecuatoriano en ese mercado, tomando en consideración que la economía china tiende a urbanizarse más, con ello, la necesidad de consumo en las ciudades aumentará, la economía crecerá y demandarán productos de mayor calidad, y ahí debe estar el banano ecuatoriano para satisfacer esa necesidad por el momento insatisfecha. La balanza alimentaria de China es deficitaria. El consumo de frutas por habitante es de 60 kilogramos, de los cuales el 60 % es importada.

Además, se está dando un aumento de su población una vez que desde el 2014 se permite que un matrimonio puede tener más de un hijo.

"Por el tema del manejo de las sensibilidades, uno firma un acuerdo no para corto plazo sino para el largo plazo del país. Estoy seguro de que el equipo negociador viene analizando hacia donde va China y cómo viene comportándose, y ha dado una revisión integral de los planes quinquenales de desarrollo económico para visualizar cómo va a cambiar su prioridad de ser la fábrica del mundo al mayor consumidor de productos en el mundo (esto quiere decir hacia dónde van sus clústeres de desarrollo), como el gobierno chino está motivando con financiamiento el desarrollo de otro tipo de industrias", dijo Hidalgo.

Un ejemplo, las plataformas digitales para dinamizar el consumo y como estas plataformas están bajo una estrategia de cadena ganadoras de compra directa de alimentos.

"Debemos perder el miedo a un acuerdo comercial con China. Por supuesto que las economías son diferentes. Cada país tiene sus fortalezas y debilidades; por eso, debemos concentrar en negociar la entrada de productos donde el Ecuador es competitivo, como el banano y el camarón, y proteger aquellos sectores económicos más débiles de nuestra industria", puntualizó Hidalgo.

Para Hidalgo todo este esfuerzo de negociación vale la pena por todas las oportunidades que China representa: un mercado de 1.4 billones de habitantes, una clase media creciente de 800 millones de personas, nuevas tendencias de consumo que han dado paso al surgimiento de tiendas “on y offline”.