Las acciones en la bolsa de São Paulo de aerolínea Gol, la mayor de Brasil por vuelos nacionales y que la víspera se acogió voluntariamente al capítulo 11 de la ley de quiebras de Estados Unidos, se desplomaron el pasado viernes un 7,76 %.

Los papeles preferentes de la compañía aérea bajaron como reflejo del anuncio para la aerolínea acogerse a una fórmula de la Justicia estadounidense que permite a una empresa que no puede pagar sus deudas reestructurarse sin la presión de los acreedores.

El desplome de los títulos de Gol arrastró también a los papeles ordinarios de la red de agencias de viaje CVC, los segundos que más perdieron en la última sesión de la semana con una caída del 3,74 %, con el sector del turismo atento a la situación de la aerolínea.

A pesar del desplome de las acciones de Gol y CVC, la bolsa paulista cerró con un ascenso del 0,62 % impulsada por la valorización de las de la minera Vale (+1,76 %).

Las acciones de Gol no tienen que ser retiradas del mercado del Ibovespa porque el pedido fue ante la Justicia de Estados Unidos, pero aún así los dueños de los papeles están temerosos frente a la situación de la compañía.

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Gol necesita reestructurar una deuda que, según el último balance divulgado, ascendía a 20.200 millones de reales (unos 3.803 millones de euros) hasta septiembre del año pasado.

El mercado reaccionó este viernes con cautela frente a la situación de la empresa, a pesar de que el consejero delegado de la aerolínea, Celso Ferrer, en declaraciones a periodistas el jueves, aseguró que Gol mantendrá las operaciones y servicios.

Otras aerolíneas, como la chileno-brasileña Latam, que domina el mercado de vuelos internacionales de Brasil; United Airlines, Delta, Aeroméxico y Avianca Colombia, usaron el mismo mecanismo para superar la grave crisis como consecuencia de la pandemia de la covid-19.

Para iniciar el proceso, Gol dijo que ya cuenta con un compromiso de financiación por 950 millones de dólares ofrecido por miembros del Grupo Ad Hoc de los propietarios de títulos de Abra, el conglomerado que controla la aerolínea brasileña y la colombiana Avianca.

Como esta financiación depende de que la Justicia de Nueva York acepte su petición de acogerse a la ley de quiebras, Gol anunció que intentará la liberación de los recursos en la primera audiencia a la que acudirá ante los tribunales estadounidense.

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