El primero de septiembre de 1988 la Universidad San Francisco de Quito abrió sus puertas como la primera entidad educativa privada y autofinanciada. Desde una casa residencial situada en la avenida 12 de octubre y Salazar, norte de la capital, comenzó a hacer historia, hasta hoy, cuando celebra 35 años de vida institucional y goza de amplio reconocimiento a nivel nacional e internacional, por la calidad académica, proyección científica y social que ha desarrollado durante estas décadas.

EXPRESO conversó con Diego Quiroga, rector de esta entidad educativa, para indagar un poco más en los puntales que la sostienen en el tiempo y espacio.

Tres décadas y media de vida académica. ¿Qué se siente cumplir esta edad y cómo ha cambiado el servicio que se da a la comunidad universitaria?

En términos generales, 35 años es una edad que nos hace una universidad relativamente joven en relación a otras. Estar presentes en rankings internacionales, en temas de investigación, educación e innovación en un período tan corto, es algo de lo que el país y nosotros, como universidad, estamos muy orgullosos.

Nos habla de innovación. ¿Consideran, en un futuro próximo, ampliar la oferta académica hacia otras áreas o abrir nuevas carreras?

Siempre estamos explorando nuevas áreas. A nivel de pregrado tenemos propuestas que van de la mano con las nuevas tendencias y estamos particularmente interesados en sacar más programas de posgrado. Y también proyectarnos para graduar profesionales con título de doctorado (PhD), que es el título más alto a nivel académico. Por el momento tenemos un programa de doctorado en Microbiología.

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Háblenos de los reconocimientos recientes de los que goza el alma mater.

En los rankings estamos entre las 60 mejores universidades latinoamericanas y por años hemos sido la número uno en Ecuador. Eso siempre es para nosotros un motivo de orgullo. Más allá de eso, la universidad tiene reconocimientos y premios constantes en diferentes áreas, incluyendo Artes Liberales, pues fuimos la primera universidad de Artes Liberales en Hispanoamérica. Además, nos destacamos en relaciones con la comunidad, la empresa privada y en general con la investigación.

¿A qué se refiere cuando habla de Artes Liberales?

Este es un sistema filosófico que viene desde la civilización griega, donde los estudiantes son agentes de su propia educación y la institución educativa les brinda oportunidades de conocimiento en diferentes áreas. Esto permite que los estudiantes puedan explorar los temas que les interesan y ser autodidactas, sin limitarse a un currículum empaquetado. En la USFQ incentivamos a nuestros estudiantes a que exploren sobre lo que les interesa. Nosotros tenemos convenios internacionales para que nuestros estudiantes, de todas las áreas, puedan viajar a Estados Unidos, Europa, Asia, para que vean el mundo. Por un lado exploran diferentes materias y también conocen diferentes realidades.

¿Consideran tener sedes en el extranjero?

Desde que la universidad abrió hemos dado esa oportunidad de experiencias internacionales para nuestros estudiantes. Ellos pueden tomar un año de su carrera en el país y universidad que escojan. Al mismo tiempo que recibimos 1.000 estudiantes internacionales cada año que vienen de intercambio a Ecuador. Además, el año pasado abrimos GAIASEuropa, nuestro hub académico en Valencia, España.

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La inclusión social es un tema importante en la educación. ¿Cómo enfrenta esto la Universidad San Francisco de Quito?

Tenemos un programa muy fuerte de becas y asistencia financiera. De todos nuestros estudiantes, el 54 % de ellos son becados y acceden a todos los beneficios universitarios. Además, desde hace 26 años la USFQ lleva adelante un programa organizado exclusivamente para garantizar la pluralidad étnica y con representantes de casi todos los grupos étnicos que habitan en el país. Está dirigido a estudiantes de pregrado indígenas.

¿Cuán difícil es acceder a una beca?

Tenemos altos requisitos académicos porque nos interesa que quienes entren sean estudiantes que puedan manejar la carga académica universitaria. Todos deben rendir un examen de ingreso con estándares internacionales en medicina de conocimiento y razonamiento. Además, tomamos en cuenta su expediente académico y extracurricular. Ya en la universidad pedimos a los becados que mantengan ciertos promedios.

¿Cuál es el nivel de apoyo e influencia que la universidad tiene en las comunidades aledañas, como Tumbaco o Cumbayá?

Tenemos muchos programas de vinculación con la comunidad a nivel nacional. Con nuestros vecinos del campus en Cumbayá aportamos en tres frentes: médico, jurídico y ambiental. En el primero desplegamos brigadas de odontólogos para atención gratuita. Lo mismo sucedo en el segundo aspecto, en el que se da asesoría legal sin costo. Y en el área ambiental llevamos adelante un programa de recuperación del río San Pedro y otros del valle.

¿Cómo han enfrentado la muerte de Santiago Gangotena?

Santiago significó muchísimo para la universidad, como fundador, ideólogo. Fue quien pensó en la universidad, quien la sacó cuando esa modalidad privada no era legal. Luchó contra viento y marea en un tiempo en el que la educación privada era mal vista. Tras su muerte, todos tenemos la gran responsabilidad de saber cómo llevar esto para que perdure en el tiempo su legado, sus ideas. Es muy importante mantener su legado para nosotros.

Ante la realidad del país, ¿cuál es la postura de la universidad y cómo aportan ustedes desde la academia para mejorar esto?

Dar prioridad a la investigación y a la ciencia es fundamental para que nuestro país salga adelante. Ecuador es uno de los países que menos invierten en estos campos. La educación de calidad es la respuesta a las preguntas de los jóvenes. Ellos necesitan oportunidades y nosotros como universidad contribuimos trayendo ciencia y tecnología al país. Formamos gente que está a la vanguardia en las tendencias mundiales, para que mejoren.

¿Qué tienen programado para celebrar su aniversario?

Estamos celebrando 35 años de formar seres humanos libres, creativos y emprendedores. A lo largo de este año recordaremos y reconoceremos los hitos que nos han llevado hasta este momento, con un enfoque en las Artes Liberales. Lo haremos a través de simposios, congresos, ferias, charlas, webinars, coloquios, eventos deportivos y más. Tenemos mucho que celebrar.

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