Pasadas las 12:00 de este viernes 15 de abril en la parroquia rural de Quito, La Merced, inició la procesión del Vía Crucis, para recordar la vida, pasión y muerte de Jesús.

Desde muy temprano varios grupos católicos se concentraron en la capilla San Francisco de Baños de la Merced para iniciar los preparativos. Una hora antes escenificaron la Pasión de Cristo con cerca de 100 personas que también participan de esta peregrinación.

Se pudieron presenciar a los personajes de los pasajes bíblicos que recuerdan las últimas horas de vida del hijo de Dios, como el propio Jesús, los apóstoles, el ejército Romano, entre otros.

Algo muy tradicional de esta procesión son los diablos que “bajan” para provocar tentación en los feligreses. Es un grupo 5 hombres y una mujer que visten con trajes que asemejan al mal: cuernos largos, cara roja, pelo largo, vestimenta negra, una trinchera y capa larga.

“Durante la procesión vamos cantando y rezando y los diablos harán cosas para distraernos para hacernos pecar. Ya depende de la fe de cada Cristiano si se deja desconcentrar y se deja llevar por lo que hace o dice el diablo” comentó a EXPRESO minutos antes Silvia Morocho, representante del grupo Pastoral de Nuestra Señora de la Merced Del Valle.

Así también, parecen las “almas santas”. Postes de caña con más de 5 metros altos, forrados con tela negra y adornos en papel de colores. Dicen que representan las vidas que sufrieron el día que murió Jesús.

La procesión avanza por la avenida Ilaló hasta llegar a la inglesa Central. Serán cerca de 5 kilómetros que recorrerán los más de 500 fieles católicos que se han congregado a esta peregrinación.