La defensa de Danilo Carrera, cuñado del expresidente ecuatoriano Guillermo Lasso, no se presentó a la audiencia de sustentación del recurso de apelación al arresto domiciliario, impuesto en un caso que investiga una presunta trama de corrupción en empresas públicas.

La defensa argumentó que, "pese a la serie de pedidos realizados en legítimo derecho", no se ha permitido contar con la posibilidad de ejercer adecuadamente el derecho a la defensa.

Anotó que el pasado viernes 15 de diciembre solicitaron diferir la audiencia, una petición que se les negó ese mismo día.

"El diferimiento era importante para analizar los 345 cuerpos del expediente. Algo que el juez Renán Andrade Castillo, quien ordenó el arresto de mi cliente, asegura hizo en dos horas. Cosa extraña porque el expediente quedó en la Sala de audiencias: decir que el juez analizó el expediente, es solamente un eufemismo o una burda mentira", señaló el abogado Calixto Vallejo en comunicado.

Agregó que en la audiencia de formulación de cargos, la Fiscalía "no presentó un solo indicio válido" en contra de Carrera, "más allá de audios editados y sin valor, o copias simples de papeles sin firma o valor alguno, que antojadizamente la Fiscalía llama 'correos electrónicos'".

Según el abogado, "se mostraron audios y voces que se atribuyen a los procesados, sin que exista una pericia que haya cotejado las voces".

Arresto domiciliario

El pasado 24 de noviembre, tras una larga audiencia de formulación de cargos, un juez atendió la petición del Ministerio Público de que Carrera quede en arresto domiciliario y no ingrese en prisión provisional por tener más de 65 años, medida que sí ordenó para otros tres imputados, entre ellos el expresidente de Empresa Coordinadora de Empresas Públicas (EMCO), Hernán Luque.

A su vez, otras cuatro personas procesadas por este caso quedaron en libertad condicional, con la obligación de comparecer periódicamente ante las autoridades judiciales mientras continúe abierta la causa.

Para la Fiscalía, Carrera "habría sido el líder de la estructura criminal junto con Rubén Chérres", amigo suyo que fue asesinado después de que se revelase un informe policial que investigaba sus presuntos nexos con una mafia del narcotráfico.

"Ambos, de forma planificada, habrían pretendido obtener réditos económicos indebidos valiéndose de su posición cercana con la política, interfiriendo en instituciones públicas como la Corporación Nacional de Electricidad (Cnel), BanEcuador y el Servicio Nacional de Aduanas", según el Ministerio Público.

Mientras, Luque "habría abusado de sus funciones instaurando una estructura de corrupción sistemática en el directorio de la empresa pública Cnel", de acuerdo al expediente de la Fiscalía.

Entre los indicios presentados para la imputación hay una declaración de un exgerente de una empresa pública que conocía sobre los contratos suscritos y ejecutados por los integrantes de esta presunta trama.

Cambios de la audiencia

En el llamado caso "Encuentro", la audiencia de formulación de cargos contra Carrera y los otros siete imputados se celebró un día después de que Lasso entregase el poder a Daniel Noboa.

La audiencia estaba programada inicialmente para el 25 de octubre, pero fue postergada ya en una primera ocasión para el 16 de noviembre por pedido de las defensas de algunos de los procesados, debido a que pocas horas antes el Ministerio Público había agregado al expediente el caso "León de Troya", sobre los presuntos nexos de Chérres con una mafia del narcotráfico.

Luego, la Fiscalía solicitó que una persona más sea convocada para la audiencia de formulación de cargos, lo que provocó un cambio de fecha de la audiencia para el 14 y 15 de diciembre, antes de volver a cambiarlo para el 24 de noviembre.