Es un segmento vulnerable. Las personas sin hogar que habitan en las calles de Quito generan preocupación por su exposición al Covid-19. Para ellos, según las autoridades municipales, se trazó un plan específico de atención y acogida.

El Municipio del Distrito Metropolitano de Quito, el Patronato San José, la Secretaría de Inclusión Social, la Secretaría de Seguridad y la Cruz Roja Ecuatoriana monitorean a las "personas con experiencia de vida en calle". En ese grupo hay personas de la tercera edad y con enfermedades preexistentes. Es decir, los más vulnerables al coronavirus.

Gabriela Cevallos, directora de Ejecución Técnica del Patronato San José, señaló que está en marcha un proyecto de habitantes de calle y un servicio de acogida denominado Casa del Hermano. Este es un "espacio de acogida temporal que atiende a personas con experiencia de vida en calle. Realiza abordajes, intervención integral y sensibilización sobre las problemáticas de indigencia, mendicidad, adicciones y exclusión social". Incluso puede convertirse en un centro de aislamiento si se detectan casos de la pandemia que registra hasta la fecha, 19 de marzo de 2020, doce infectados en la capital.

Otro plan en marcha es la entrega de equipos de emergencia. Personal del Patronato San José acudió al sector de San Roque, donde entregó kits de primera necesidad a una familia compuesta por una mujer y seis hijos menores de edad. 

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Además, bajo un mapeo realizado previamente, "el equipo de la institución entregó alimentos a personas de calle en un sector del centro de la urbe".

Las autoridades municipales enfatizaron en que los proyectos y servicios de atención se mantendrán en los próximos días. El personal cumple con medidas sanitarias para el acercamiento y ayuda a este segmento de la población.