El Consejo Nacional Electoral (CNE) analiza las opciones que se podrían aplicar para que las medidas de aislamiento social generadas por la expansión del COVID-19 en el país, impacten lo menos posible al calendario electoral.

Esto luego de que la idea lanzada por la presidenta del organismo, Diana Atamaint, de pedir a la Corte Constitucional (CC) un pronunciamiento sobre la posibilidad de aplazar las elecciones, previstas para el 7 de febrero de 2020, no encontrara apoyo en los demás consejeros.

Los cinco integrantes del CNE tuvieron un primer encuentro virtual conjunto con los directores de las diferentes áreas de la entidad, quienes dieron a conocer las estrategias para evitar un desfase en la planificación de los comicios que se desarrollarán en diez meses.

Esta reunión, sin embargo, no constituyó una sesión del pleno del CNE que primero debe aprobar un reglamento que le permita sesionar bajo la modalidad virtual para que las resoluciones que ahí se tomen tengan un sustento legal y no sean cuestionadas en el futuro.

Se espera que en las próximas horas se apruebe esta normativa para que la presidenta Atamaint pueda convocar a una sesión de pleno para debatir y aprobar, al menos, dos reglamentos urgentes: uno sobre la elaboración del padrón pasivo y otro para la campaña de cambios de domicilios.