Ante un nuevo brote de violencia en el país y que el presidente Guillermo Lasso haya decretado el décimo séptimo estado de excepción, los candidatos a la Presidencia conversan con EXPRESO sobre la utilización de esta herramienta.

A raíz del asesinato del alcalde de Manta, Agustín Intriago, y el nuevo episodio de violencia en las cárceles y calles de Guayaquil y Esmeraldas, el gobierno de Lasso decretó el estado de excepción en Manabí, Esmeraldas y el cantón Durán, y del sistema penitenciario.

Este Diario intentó contactarse con los presidenciables Daniel Noboa (alianza ADN), Luisa González (Revolución Ciudadana) y Bolívar Armijos (Amigos) para consultarles su criterio, pero no respondieron a las peticiones.

Aunque para el régimen de Lasso esta fue una medida necesaria, para Jan Topic, presidenciable por la Alianza Por un Ecuador Sin Miedo, esta es una desgastada y repetitiva práctica del régimen de Guillermo Lasso que, hasta el momento, no genera verdaderos cambios o soluciones en el país.

“Estoy dispuesto, en momentos de crisis, a tomar medidas extraordinarias (...) mucho más allá de la desgastada práctica de declarar estados de excepción (...)”, sostiene Topic sin brindar mayores detalles de cuáles serán sus alternativas.

Asimismo, el candidato cree firmemente que las soluciones no se demostrarán decretando estados de excepción, sino con “acciones”, aunque tampoco explica cuáles serían estas en su lucha contra la creciente ola de inseguridad en el país.

“Actuar con valentía y determinación para lograr un futuro más seguro y próspero, no será excepcional y no se demostrará con decretos, sino acciones que asumiré en primera persona (...)”, asegura Topic.

El aspirante a la Presidencia explica que declarar estado de excepción significa una protección a la sociedad de amenazas o crisis. “Dicho de otra manera, la excepción es enfrentar un gran desafío que requiere medidas extraordinarias (...)”, agrega. 

En esa misma línea, Otto Sonnenholzner, de la alianza Actuemos, sostiene que la declaratoria de los estados de excepción es poco efectiva si no se la ejecuta con contundencia y otras acciones complementarias que reflejen la necesidad de la figura.

“Usaremos todo lo que esté a nuestro alcance. Invertiremos en inteligencia y equiparemos a nuestras fuerzas del orden para que actúen con todo el peso de la ley”, señala como opción el también exvicepresidente.

Por su lado, Fernando Villavicencio, presidenciable del movimiento Construye, dice que esta medida no es un “comodín” y que no descarta aplicarla, siempre y cuando sea necesaria y viabilice otras medidas.

“No se trata solo de disponer la movilización de Fuerzas Armadas o de un toque de queda; el estado de excepción también permite asignar recursos adicionales para seguridad (...)”, hace hincapié Villavicencio.

Asimismo, destaca que, de decretar un estado de excepción, aprovechará el poder hacer contrataciones rápidas para fortalecer a la fuerza pública e, incluso, utilizar la suspensión de la inviolabilidad de domicilio.

Por otro lado, Xavier Hervas, presidenciable del movimiento Renovación Total (RETO), hace hincapié en la excepcionalidad de esta medida y que no puede ser utilizada sin complementarla con otras acciones.

“El estado de excepción es para ‘excepción’ y articulando con acciones adicionales para que realmente tenga impacto, no para hacer noticia”, sostiene Hervas, quien por segunda ocasión participa en los comicios generales para intentar llegar a la Presidencia de la República.

Yaku Pérez, de la alianza Claro que se Puede, afirma que evitaría recurrir a la figura del estado de excepción, aunque sí cree que en momentos de crisis se deben tomar medidas ‘firmes’. “Tomaríamos acciones preventivas y de largo plazo para mejorar la seguridad ciudadana y la situación carcelaria”.

Pérez asegura que empezaría dotando a la Policía Nacional. Aparte, cree conveniente fortalecer la educación, el acceso a oportunidades laborales y programas de inclusión social. “Implementaremos un programa de rehabilitación y reinserción social para que pueda reintegrarse en la sociedad una vez cumplida su pena”