
Loja: Exigen atención urgente ante falta de servicios básicos en Colinas Lojanas
Falta de agua, seguridad y vías seguras es un problema para sus residentes
En el barrio Colinas Lojanas, ubicado al sur de la ciudad de Loja, los moradores viven entre carencias que afectan su calidad de vida. La falta de servicios básicos, como agua potable, sumada al mal estado de las calles y a una creciente sensación de inseguridad, ha motivado a la comunidad a exigir atención urgente por parte del Municipio.
¿Qué piden los vecinos?
Aunque se han realizado pedidos formales desde hace varios años, los vecinos aseguran que las respuestas han sido mínimas o nulas.

Uno de los habitantes, José Manuel Rueda Valladares, relató que su vivienda estuvo 21 días sin servicio de agua potable. La situación, según comenta, se repitió en otras casas del sector. “Recién ahora el agua llega por horas. Uno tiene que estar pendiente para llenar baldes, porque no hay garantía de cuándo vuelva a cortarse”, explicó. Este problema ha obligado a muchas familias a limitar actividades básicas del hogar y depender de métodos improvisados para abastecerse.
El mal estado de la vía principal del barrio es otro problema que los residentes enfrentan a diario. Las calles están llenas de huecos y se vuelven intransitables en ciertas temporadas. En época seca, el polvo afecta a los vecinos, especialmente a niños y personas mayores; mientras que en época de lluvias, el lodo complica aún más el desplazamiento. Para los habitantes, este panorama refleja la falta de mantenimiento por parte del Municipio y el abandono en el que se sienten.
El presidente del barrio, Luis Eriquez, confirmó que las gestiones ante las autoridades municipales han sido constantes, pero poco efectivas. “Hemos enviado varios oficios al Municipio solicitando soluciones. Nos responden con un correo donde confirman que recibieron el documento, pero no hay un seguimiento posterior”, indicó. Como ejemplo, citó la construcción de un baño en la cancha del barrio que fue inaugurado hace más de seis meses. Hasta la fecha, no se ha entregado la llave ni se ha asignado a alguien para que lo administre. Actualmente, el lugar está cubierto de maleza y sin uso.

La inseguridad también preocupa a los moradores. José Rueda contó que se han registrado robos en varias viviendas, algunos cometidos por personas que llegan a vivir al sector de forma temporal. “Incluso a un militar le robaron, viviendo al frente de un policía. Eso nos dice que nadie está a salvo”, expresó. Ante estos hechos, los vecinos deben recurrir al presidente barrial para gestionar presencia policial, ya que no cuentan con patrullajes constantes ni con un sistema de seguridad organizado.
Los problemas con el alcantarillado agravan la situación. Según Eriquez, hay conexiones pendientes y en algunas casas se han presentado filtraciones durante las lluvias. Recordó que hace dos meses el alcalde visitó el sector y ofreció enviar técnicos al día siguiente para revisar los daños. Sin embargo, hasta ahora no ha llegado ningún equipo. “Son promesas que se hacen en el momento, pero no se cumplen. Eso genera desconfianza”, añadió.
Respecto al agua potable, el dirigente confirmó que hay sectores del barrio que estuvieron hasta 20 días sin el servicio. Aunque el suministro se ha restablecido parcialmente, sigue siendo intermitente. A esto se suma el deterioro de espacios públicos. Desde la dirigencia barrial se ha solicitado al Departamento de Ornato que realice recorridos por el sector, ya que muchos vecinos se niegan a limpiar sus veredas, argumentando que el Municipio tampoco cumple con su parte.