Brayan Angulo muestra sus credenciales de goleador y eso es una buena noticia para el Emelec de Alfredo Arias, que tenía una asignatura pendiente en ese rubro con las deficientes campañas de los atacantes argentinos Denis Straqcualursi y Emanuel Herrera.

Movilidad, contundencia y eficacia, eso fue lo que puso en evidencia ayer el joven atacante azul, autor de un doblete para el triunfo (3-1) frente a Fuerza Amarilla en el estadio Capwell.

En un partido que se le complicaba al Bombillo por el sorpresivo gol de Jesús Preciado, el artillero de 20 años puso paños fríos al encuentro y desbordó la emoción de los aficionados eléctricos que llenaron otra vez la renovada ‘Caldera’.

Angulo estuvo por todo el frente de ataque ante a los machaleños, eso lo sufrieron los zagueros centrales Luis Luna y Pablo Cifuentes, quienes no pudieron con el oportunismo del nuevo grito de gol azul, que ya suma ocho conquistas en el año, tres más que el ‘Traca’ y siete por encima del ‘Tanque’, relegados a la suplencia por la buena temporada del ofensivo, a quien Arias le ha brindado toda la confianza, esa que el anterior técnico Omar De Felippe se la daba solo a ratos.

Los atacantes foráneos del Bombillo no igualan la campaña de Angulo ni sumando los goles logrados entre ambos.

El goleador eléctrico no hubiera podido plasmar toda su efectividad ante la red sin el eficiente juego mostrado por las bandas, donde Cristian Guanca y Fernando Giménez desequilibraron. Una buena combinación entre ambos fue la antesala del primer gol de Angulo, con el que los millonarios volvieron al compromiso y los aficionados respiraban con algo de tranquilidad.

Lo que da resultados, hay que volver a aplicarlo. De eso se dieron cuenta los jugadores del Bombillo y otra vez por los costados se dio la llave del gol, pero esta vez fue Óscar Bagüí el que cedió para que Angulo haga rugir nuevamente el fortín del conjunto azul.

Con la ventaja del tricampeón terminó la primera etapa ante un cuadro visitante que tuvo como único delantero en punta a Roberto ‘La Tuca’ Ordóñez, quien sin compañía se tuvo que batir con la línea de zagueros de los dueños de casa.

Para la parte complementaria, los eléctricos mantuvieron ese juego desequilibrante por los costados. Si Angulo fue una pesadilla para los defensores orenses, el ingreso de otra nueva figura eléctrica no desentonó. Así fue como Abel Araujo aprovechó para marcar el tercer tanto luego de un nuevo centro de Giménez.

El Capwell fue una fiesta tras la cuarta victoria consecutiva de los eléctricos, que ya se ubican segundos en la tabla y mantienen vivo el sueño de conseguir el tetracampeonato de la mano de Arias, quien de a poco le pone su sello al juego de los millonarios.