La Agencia de Regulación y Control de Energía y Recursos Naturales no Renovables informó este viernes 28 de octubre que ha iniciado “las acciones pertinentes ante la Fiscalía General del Estado” con el objetivo de “esclarecer los hechos”.

Su comunicado se refiere a las notas publicadas por EXPRESO, en donde se informa sobre la desaparición de 228 toneladas de roca mineralizada, altamente concentrada con oro, de las bodegas que la entidad tiene en Imbabura.

De acuerdo con la Contraloría, en su informe con indicios de responsabilidad penal DPI-0013-2022, en las bodegas de la Agencia había hasta diciembre de 2020 un total de 2.021 toneladas de material aurífero. Para el inventario del 31 de diciembre de 2021, en los registros solo se encontró 1.793 toneladas. Para la entidad es incorrecto afirmar que han desaparecido, pero tampoco ha indicado dónde se encuentran y cuál es la situación.

Para la Contraloría, en cambio, sobre el faltante, esas 228, 24 toneladas, no hay evidencia de cuál fue su destino. El informe también señala que del material perdido se podrían extraer 706 onzas de oro, cuyo valor en el mercado es de 1,3 millones de dólares.

Este diario también informó que un exfuncionario de la Agencia de Regulación y Control de Energía y Recursos Naturales no Renovables denunció ante la Fiscalía la existencia de una red de corrupción, que incluyen a funcionarios públicos, policías y guardias de las bodegas, quienes estarían permitiendo la salida del material a cambio de dinero y reemplazando las rocas por sacos de ripio.