Un sitio para los amantes de los juegos de mesa
El Baúl del Enano cuenta con más de cien juegos para todas las edades.
En medio de casas particulares y discretos negocios, una vivienda sobresale en las calles Isla Pinzón y Tomás de Berlanga, norte de Quito.
Ahí, en medio de espadas medievales, mesas de madera y parafernalia de Harry Potter se levanta El Baúl del Enano, un café que no gira alrededor de la comida, sino de más de un centenar de juegos de mesa que reposan en su interior.
Leonardo Jaramillo, Gonzalo Santillán, Henry Cardoso, Andrés Jaramillo y Daniel Arteaga son los creadores de este espacio, que surgió como una iniciativa para estrechar lazos entre los amantes de los juegos tradicionales y de otros, hoy de culto, como Magic (juego coleccionable de cartas), War Hammer y Dungeons and Dragons.
“Un espacio de encuentro para amantes de los juegos de mesa, sano, donde no te vas a emborrachar, sino a divertirte y conocer a otras personas que comparten tus mismos gustos e intereses”, explicó Jaramillo.
El sitio atrae a personas de todas las edades, entre ellos familias, que llegan a comer una hamburguesa, tomarse una bebida en los enormes jarros de calavera y probar suerte con alguno de los juegos del local.
Las nuevas adquisiciones para la colección se eligen según las reseñas digitales, los galardones que han recibido internacionalmente y la acogida de los dueños. “Pero tenemos buen ojo”, comentó Santillán risueño.
Magic, no obstante, es el juego insigne del establecimiento, que organiza eventos, torneos semanales e incluso el campeonato nacional.
Durante la pandemia, y con el fin de mantener a su clientela, los propietarios desarrollaron una aplicación virtual a través de la cual los usuarios podían seguir conectados a los torneos de Magic.
La app también funciona con otros juegos de mesa. A la par se han ido implementando clubs de actividades como de ajedrez y bonsái que son presenciales y con aforo limitado.
“Hemos tenido que cambiar de estrategia, hacer más publicidad y desarrollar otras actividades como los clubs para atraer a un nuevo público”, agregó Santillán.
A futuro les gustaría que El Baúl del Enano se expanda a otras localidades del distrito, como Cumbayá y a ciudades como Cuenca y Guayaquil.
