La gerente de la Empresa Pública Metropolitana de Movilidad y Obras Públicas (Epmmop), Claudia Otero, presentó ante el Concejo Metropolitano el informe sobre la colocación de nombres femeninos a algunas calles de la ciudad. El objetivo de esta iniciativa es disminuir la brecha de género en la nomenclatura urbana.

Antes de la aprobación de la Ordenanza Metropolitana No. 21-2021, solo el 3,3% de las calles de Quito tenían el nombre de mujeres. A la fecha, se han designado 11 calles con nombres femeninos, lo que representa un avance significativo.

El proceso de selección de los nombres ha sido participativo y ha contado con la colaboración de diversas instituciones y organizaciones. Se ha buscado reconocer a mujeres destacadas en diferentes ámbitos, como la política, la cultura, la ciencia y la educación.

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Con respecto a la nomenclatura vial, en la zona urbana se ha atendido en un 95%, mientras que, del universo de 33 parroquias rurales, existen 13 que aún se encuentran en proceso de análisis para la denominación de las vías, el mismo que se realiza en consenso con los representantes barriales y GAD’s parroquiales.

Las parroquias rurales que se encuentran en la etapa de socialización de nombres son: Lloa, Nono, Puéllaro, Perucho, Chavezpamba, Atahualpa, San José de Minas, Pacto, Nanegalito, Píntag, Gualea, Pifo y Nanegal.

A la fecha, el universo de vías de acuerdo al código maestro vial en el Distrito Metropolitano de Quito corresponde a 14.913 categorizadas de la siguiente manera: 6.540 vías que tienen asignado sólo código alfanumérico en su identificación, 8.373 vías que tienen asignado código o nombre propio.

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