Tres esculturas importantes de la urbe capitalina son rehabilitadas por la Empresa Pública Metropolitana de Obras Públicas (Epmmop): perro selva, perro barroco y tierra de osos.

La primera estaba situada en el parque La Carolina. El segundo en el mirador de la avenida Velasco Ibarra y el último en la esquina del parque El Ejido.

Las tres fueron retiradas de estos lugares para trasladarlas a los talleres de la entidad municipal, donde serán restauradas para mantener el ornato y belleza de la ciudad.

En cada una de las esculturas que mide más de dos metros, se realizará la limpieza, renovación de pintura y cuidado de detalles con el fin de conservar su vida útil.

La artista quiteña, Mónica Vásquez, será la encargada de pintar, curar y revestir de una gama de colores azules ligados a la naturaleza urbana, a los perros, los mismos que ya fueron tratados hace un tiempo, pero por la inclemencia del tiempo, la pintura se dañó nuevamente, según manifestaron las autoridades de la Epmmop.

Con respecto a los osos, que fueron edificados por Francisco Proaño, otro artista reconocido, en 2016, debido a la conferencia de las Naciones Unidas sobre vivienda y desarrollo urbano, se identificó que el tronco en el que se asentó la escultura tuvo un desgaste natural por el tiempo y clima, dejando inestable a la obra de arte.

Una vez restaurada, se la colocará en un sitio acorde a la temática, ya que representa al oso andino, una especie representativa de los Andes y centro de atención del turismo.