Miles de millones de dólares, que bien podrían mejorar la calidad de vida de los ecuatorianos se pierden anualmente por múltiples razones, entre ellas, la ineficiencia de los funcionarios públicos, la falta de planificación y la galopante corrupción en la contratación de obras y servicios, que puede llevarse hasta el 50 por ciento del monto del contrato. Para citar un ejemplo, lo que está ocurriendo con las 186 ambulancias compradas durante el gobierno del presidente Guillermo Lasso, que empezaron a ser entregadas en octubre de 2023 a las unidades médicas de diversas provincias del país. Siete meses después, una parte de esos 186 vehículos no han sido equipados por alguna razón que funcionarios del Ministerio no hacen pública, y que tiene que ver con su legalización en el país y su matriculación. Por ende, parte de esos vehículos están estacionados ahora en un hospital de Manta, como si la necesidad que se tiene de ellos no fuera inmediata en las poblaciones que carecen de este tipo de servicio.

Otro grupo de estas ambulancias, las que llegaron a los hospitales y entraron en operación, en parte están paralizadas por falta de mantenimiento mecánico, que en unos casos tiene que hacerse lejos de los lugares donde sirven y, en otros no se puede hacer porque, por ejemplo, los discos de freno se acabaron antes de los 40.000 kilómetros previsto para su cambio. ¿De qué sirve tener una ambulancia si esta no puede atender las emergencias?

No encuentro explicación del porqué los funcionarios del Ministerio de Salud no midieron el costo del combustible y el aumento del kilometraje por los mantenimientos preventivos cada 5.000 kilómetros. ¿A quién se le ocurre que un vehículo, que va a prestar servicio en el cantón Huaquillas, fronterizo con Perú, tenga que acudir a los mantenimientos en Cuenca? ¿Acaso no era más fácil hacerlo en Machala? ¿A quién se le ocurre que a la ambulancia destinada a la isla Santa Cruz deba hacérsele el mantenimiento en Guayaquil?

Así es como se gastan los recursos públicos. Es de esta forma cómo en Ecuador se han despilfarrado millones de millones de dólares. Otra gran parte del dinero público en el área de la salud se la lleva la corrupción. Ahora están pidiendo una comisión del 30 % por la campaña presidencial. ¡Basta de tanta ratería!