Modestamente, me permito comentar sobre las ideas expuestas por los distinguido señores Pedro P. Jijón O. y Lic. Robespierre Rivas, desde luego con sus permisos.

En cartas publicadas el mismo día, 18.11.2021 en página editorial de Diario Expreso, expresan criterios sobre el uso y abuso del sombrero y del poncho. Sutil y veraneantes escriben las costumbres que se les ha dado.

Sobre el sombrero, como dato adicional, diré que es originario de la madre España, traídos y usados por los altos mandos de los conquistadores, con buenas costumbres, como respeto, orden, disciplina y más valores morales que de nuestros antepasados hemos heredado, como bien lo dice el Sr. Rivas.

Incluso, mi padre nos enseñó que al sentarnos a la mesa y servirnos el alimento que Dios nos brinda debemos sacarnos la gorra o el sombrero.

El Sr. Pedro Jijón, en forma precisa, nos hace notar que a pesar de que el sombrero es de origen español, ciertos parlamentarios lo toman como ancestral y no lo aflojan ni en el recinto de la Asamblea Nacional, desmereciendo la honorabilidad que corresponde. Sobre el poncho, este sí es una costumbre ancestral. Lo usan obligados por el frío de los Andes.

Luis Alfonso Freire