Se necesita abordar desafíos socioeconómicos con estrategias multidimensionales. Ha habido crecimiento moderado; el PIB crece a un ritmo que deja mucho que desear. La tasa de desempleo ha disminuido ligeramente, mas sigue siendo una preocupación mayor, en especial entre los jóvenes. La inflación, impulsada por factores internos y externos, erosiona el poder adquisitivo. Es esencial fomentar la inversión en sectores clave como tecnología y energías renovables, que generan empleo y promueven un desarrollo sostenible. Educación y salud deben ser prioridades. Invertir en educación de calidad es invertir en el futuro; y un sistema de salud accesible y eficiente es fundamental para garantizar el bienestar de la población. Políticamente se requiere de mayor transparencia y participación ciudadana en la toma de decisiones. La estabilidad política es clave para la confianza de los inversores y la implementación efectiva de políticas públicas. Los desafíos son muchos, pero también las oportunidades. Con políticas enfocadas en inclusión social, innovación económica y estabilidad política, el país puede superar obstáculos y encaminarse a un futuro prometedor. Es momento de unir esfuerzos y trabajar juntos por el bienestar de todos.

Jimmy Murillo E.