Me gustaría responder al nuevo artículo antirruso del exministro de Relaciones Exteriores de Ecuador Juan Carlos Holguín, “El ataque de Rusia a Ucrania y al mundo”, en el cual recuerda la situación con la evacuación de estudiantes ecuatorianos de Ucrania y se queja de que les resulta difícil obtener educación en su país de origen.

Poco tiempo después del inicio de la operación especial en marzo de 2022, el gobierno ruso propuso al gobierno de Guillermo Lasso inscribir a estudiantes ecuatorianos que estudiaban en Ucrania en universidades rusas de forma gratuita con capacitación en ruso en las mismas especialidades. El entonces gobierno ecuatoriano rechazó con arrogancia la propuesta por razones políticas. Como resultado, según la información disponible, los jóvenes ecuatorianos que abandonaron Ucrania no pudieron continuar su educación especializada en su patria, perdiendo años de clases y la fe en su propio gobierno.

En cuanto a las acusaciones del Sr. Holguín contra Rusia, el diplomático, aunque antiguo e infructuoso, no debería unirse a una de las partes en el conflicto. Rusia y Ecuador están vinculados por una larga y estrecha cooperación comercial, económica y humanitaria. El bienestar de muchas familias ecuatorianas depende de mantener un alto nivel de esos vínculos. Esos artículos del exministro de Relaciones Exteriores los perjudican gravemente. También cabe recordar que en junio de 2022 él declaro que su gobierno estaba dispuesto a sacrificar el mercado ruso por el bien de la integridad territorial de Ucrania (no es una cita, pero este es el significado). A mi parecer, tantas declaraciones irresponsables damnifican a miles de ecuatorianos, involucrados en relaciones con Rusia.

Sr. Holguín cree que el ataque de Rusia a Ucrania es un ataque a todo el mundo. Me gustaría recordarle a mi excolega que los problemas que surgieron en varias regiones del mundo en el campo de los alimentos y la energía no están relacionados con la política de Rusia, sino exclusivamente con las sanciones ilegales impuestas por el Occidente colectivo tan querido del Sr. Holguín.

Vladimir Sprinchan

Embajador de Rusia