Del Estado paternalista, dueño del control de soluciones, de burocracia abultada absorbente y corrupta, con lo que hemos vivido sin conseguir el bienestar que siempre nos prometen, estamos cansados. Los servicios básicos urbanos y rurales son ineficientes, discriminatorios, inequitativos e inconstitucionales, lo cual nos debe llevar a remediar inmediatamente estos males casi eternos, caso contrario el tren del progreso y la modernidad se nos pasará, como siempre. La obtención de medicinas con recetas de instituciones públicas en farmacias privadas es una gran solución, tanto para el abastecimiento como para erradicar la corrupción. Todos sabemos que con la salud del ciudadano se hace ganancias mayúsculas y que los enquistados de gobiernos anteriores siguen robando; por eso se oponen a este sistema. De acuerdo al anuncio del Gobierno, el cambio se haría en marzo, aunque el mes ya terminó. En las escuelas públicas también se debe seguir el ejemplo: por medio de bono entregar el equivalente al gasto a los padres de familia para que ellos matriculen en el establecimiento que mejor les parezca. Ello hará que se involucren en las actividades administrativas, sociales, deportivas y recreativas. En otros países la lista de útiles escolares es vendida a través de asociaciones de profesores, lo que ayuda a las recreaciones anuales de los estudiantes. No quieren que se cambien las cosas en Ecuador, sin embargo, a cada instante hay reclamos. Encontraremos discriminación si revisamos minuciosamente la lista de becados que se encontraban en Ucrania.

Franklin Lituma Manzo