Expreso publicó el 3.07.21: la Casa de la Cultura Núcleo Santa Elena, en unión con el Instituto Nacional de Patrimonio Cultural, trabajará en el mantenimiento de muebles e inmuebles íconos que los representantes de la Cía. Anglo entregaron al Estado por la reversión de los campos petroleros en Ancón. Analizando los beneficios obtenidos por el pueblo anconense, hemos retrocedido. Nada nuevo se ha hecho; el GAD (de gobierno autónomo descentralizado no tiene nada) funciona en una oficinita, adjunto a la del teniente político. Qué diferencia con los pueblos petroleros de nuestro Oriente, hoy florecientes parroquias o cantones por las regalías que reciben; o Portovelo, con un museo donde maquinarias y más objetos que usaban los americanos en la explotación de las minas de oro se exponen al público. En cambio en Ancón con la reversión vinieron nuevos mandamases de Quito a instalarse en las mejores casas del Barrio Inglés. Al liquidarse Preproducción regresaron a su tierra dejándolas clausuradas como alimento de polillas o vendiéndolas a buen precio. El hotel fue entregado a Pacipetrol no sé en qué condiciones; el Club Ancón, que comenzó a caerse, quedó en acefalía; el Club Nacional, decano en la Península, desapareció; las casas de empleados y obreros en mal estado por falta de mantenimiento. El Instituto de Patrimonio Cultural debe hacerse cargo de estos edificios, íconos de la arquitectura inglesa, incluyendo la iglesia, inventariando y entregándolos luego a una institución  local con capacidad para administrar estos bienes, propiedad de la comunidad anconense.

Luis A. Freire R.