Este 21 de febrero fue la fecha elegida para el esperado concierto de Luis Miguel y sus fanáticos han acudido a la cita con horas de anticipación. Desde las 15:00, hora en la que se abrieron las puertas del Estadio Olímpico Atahualpa, centenas de personas ya hicieron fila.

El contingente de seguridad se desplegó desde las 6:00. Andrés Borja, responsable de la Unidad de Control de la Secretaría de Seguridad, comentó a EXPRESO que el operativo tiene 1.185 efectivos entre Policía Nacional, Cuerpo de Bomberos. Agentes de Control, de Tránsito y Gestión de Riesgo.

En las entradas al recinto se controla el ingreso de bebidas alcohólicas, armas blancas y otros objetos prohibidos. "Ventajosamente los ciudadanos ya conocen que no se pueden pasar paraguas, correas, objetos cortopunzantes. En términos generales, la gente ha respetado las normas", sostuvo.

Quienes ingresan al estadio lo hacen, en su mayoría, vistiendo abrigos, cintillos dorados con el nombre del artista, sombreros negros y algunos con chaquetas con detalles dorados que caracterizan al 'Sol de México'.

La presentación del mexicano de 53 años se realiza en medio del estado de excepción que vive el país desde el 9 de enero por la escalada de violencia. Se prevé que se inicie a las 19:30, ya que las 00:00 rige el toque de queda.

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