A pesar de su ascenso temprano a la fama y su belleza inmaculada, parecería que Hollywood no se tomó siempre en serio a Brooke Shields (58). Desde sus primeros días como modelo hasta sus controvertidos romances y luchas personales, su carrera estuvo marcada por altibajos y oportunidades perdidas.

(Te invitamos a leer: Pedro Pascal y Dakota Johnson sorprenden con un beso en las calles de New York).

Películas emblemáticas rodadas antes de los 15 años -'Pretty Baby' (1978), 'The Blue Lagoon' (1980) y 'Endless love', de Franco Zeffirelli (1981)- la catapultaron a la fama. Pero su imagen casi virginal la limitó a papeles en su mayoría superficiales y poco desafiantes.

Para Shields, la vida en el mundo del cine ha sido un constante equilibrio entre la fama y el olvido. Ahora está lista para reaparecer y cautivar al público con su participación en 'La Madre de la novia', una producción de Netflix.

Con esta interpretación, Brooke se ofrece una oportunidad para redescubrir su habilidad para encantar a la audiencia y dejar en claro que ella es en realidad una actriz capaz de transmitir profundidad y emoción en la pantalla.

¿Quieres acceder a todo el contenido de calidad sin límites? ¡SUSCRÍBETE AQUÍ!