El cuerpo de Douglas Marcillo Chavarria, el taxista de 74 años, que murió ahogado la tarde del sábado 15 de abril en el sector del Fortín, en el noroeste de Guayaquil, fueron llevados a su natal Jipijapa, cantón de la provincia de Manabí de donde era oriundo.

El día de la tragedia que le arrebató la vida, el adulto mayor estaba acompañado de su esposa, Zoila Guerra, quien vio como su cónyuge y padre de sus hijos desaparecía entre el agua que inundaba esta zona porteña, producto del fuerte aguacero que cayó sobre el Puerto Principal.

Los restos del septuagenario fueron hallados la mañana del domingo, por sus familiares, quienes realizaron una labor incesante para hallarlo. Tenían la esperanza de encontrarlo con vida.

"Pedimos ayuda a los organismos de socorro, a la Policía, pero nadie nos ayudó, nos decían que no era su competencia. El cadáver lo encontró su yerno", contó una allegada del fallecido, quien será sepultado la tarde de hoy lunes 17, en un cementerio de Jipijapa.

En esta zanja, en mayo del 2014, murieron ahogados dos hermanos, cuya casa, por la fuerza de la lluvia se desplomó. Solo el cuerpo del mayor de los niños fue localizado. Moradores solicitan que se tomen las medidas necesarias para evitar otra desgracia.