La comunidad de la décima etapa de la Alborada reclama el poco mantenimiento que ha recibido su parque ubicado en la manzana 211, cerca de la intersección de las calles Eleodoro Avilés Minuche y Quijos. Alegan que la limpieza de maleza llega, aunque cada dos a tres meses, pero la reposición de los juegos para niños lleva en el olvido varios años.

Los juegos de esta parque están oxidados, a tal punto que ha corroído el metal dejando huecos a la resbaladera del punto, representando un peligro para los pequeños que buscan hacer uso del espacio, los pasamanos también están desgastados y en los balancines (sube y baja), falta uno. En el parque también se observan restos de envases de comida y fundas plásticas regadas.

De acuerdo a la comunidad, el deterioro que se ve al día de hoy, lleva desde pandemian, en el 2020.

Ciudadanos como Carlos Delgado, quien vive en esta manzana con sus dos hijos, ambos menores a los 10 años, explica que son pocos los espacios verdes que aún se mantienen en buen estado, o al menos, aún son medianamente utilizables.

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"Quiero jugar con ellos, pero ni se pueda, o están sucios o con juegos dañadado, o ambas, que es mucho peor. ¿Dónde quedaron las obras del Municipio? Nosotros apoyamos a limpiar, ¿pero cuándo llegará la regeneración a la zona?", reclama el habitante.

Asimismo, la ciudadana Lourdes Orozco, señala que los daños pueden pasar de un simple raspón. “Si le da tetano a mi niño porque solo pasó por aquí, se cayó y raspó con uno de esos juegos, ahí el Municipio no tomará responsabilidad, capaz ni nos tomarán en cuenta. Lo mínimo que pueden hacer es quitar los juegos, eliminar el riesgo antes de que pase algo”, sentencia.

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