El primer paciente que atendió el psiquiatra John Robalino, a través de la pantalla de su celular, era de Salitre. Adicional al problema mental que parece, tiene movilidad reducida y viajar desde ese cantón del Guayas hasta Guayaquil le resulta complicado. 

Por eso, desde enero de 2020, en el Instituto de Neurociencias abrieron la opción de dar terapias psicológicas y psiquiátricas a través de videoconferencias. Esto, para facilitar el tratamiento de pacientes de la tercera edad, con problemas de movilidad, discapacidad o niños con autismo.

Elena Rodríguez, jefa de Consulta Externa del Instituto de Neurociencias, explicó que investigaron a otros hospitales del mundo que también ofrecen la misma posibilidad y decidieron implementarlo en Guayaquil. El hospital de Neurociencias atiende a aproximadamente 6.000 pacientes al mes, de diferentes cantones y provincias. Rodríguez calcula que entre un 30 o 40 por ciento tiene diferentes dificultades para trasladarse hasta la institución, ubicada en el norte porteño.

Desde que inició el plan, han atendido a menos de diez pacientes, en su mayoría, con demencia y esquizofrenia. 

Rodríguez dijo que tienen pensado adecuar una sala solo para hacer estas video terapias, pero por ahora, los siete médicos psiquiatras y cuatro psicólogos que tiene el hospital están trabajando desde su escritorio.

Especificó que, en el camino, el  único problema con el que se han topado hasta ahora es con la mala conexión a internet que hay en algunos sectores donde residen los pacientes. "De ahí, no hay mucha diferencia entre las terapias personales que las virtuales", dijo Robalino. 

Los galenos aclararon que, pasadas tres terapias virtuales, los pacientes deberán hacer una personal. Además, los medicamentos sí deben ser retirados personalmente. Este servicio también mejora la condición de algunos usuarios que parecen el 'Síndrome de la bata blanca', es decir, que se ponen nerviosos, tensos o violentos por acudir a un hospital.