El presupuesto económico para este 2023 fue aprobado este 3 de agosto, por el Concejo Cantonal en primer debate, y en la intervención el alcalde de Guayaquil, Aquiles Álvarez, explicó no solo que tiene una deuda enorme en contra, sino que esta los ha llevado a hacer recortes en prácticamente todas las direcciones para cumplir con todo lo previsto en inversión social y obra pública este año.

“Son $ 99 millones los que tenemos en contra, con partidas ya emitidas; y por ende hemos tenido que recortar el presupuesto de muchas direcciones buscando no afectar la obra social, ni la inversión en salud. Va a ser duro, pero saldremos adelante, vamos con fe”, señaló Álvarez en relación al informe que durante la sesión se mostró; y reflejó que los ingresos presupuestarios con los que trabajarán serán de $ 656 millones (incluidos los rubros que esperan recaudar hasta diciembre), y no los $ 755 que se supone recibirían en la administración.

“Esta administración recibe un presupuesto con obligaciones pendientes y en función de eso ha tenido que hacer lo necesario para cumplir con sus obligaciones, y a la vez no generar mayores compromisos de los que pueda cumplir. Hay un hueco presupuestario grande. Ahora hay que ver cuál es la mejor forma de invertirlo, que es el fin de este punto en la sesión”, explicó el edil Raúl Chávez; quien planteó que el 58 % del total sea destinado a inversión social; otro 16 % a los gastos laborales; un 12 % a los gastos operativos; y un 14 a los gastos de recolección de basura.

Que dentro de la inversión social, señaló, está contemplada la obra pública; destinando a la vez un 46 % a las obras para el distrito 2, que ha estado “históricamente olvidado”, según se ha venido ya reconfirmando en la data que han recolectado para el proyecto de reordenamiento territorial de la ciudad. Porcentajes que, en esta primera fase, fueron aprobados por todos. 

"Lo que nosotros aprobamos la vez anterior se está poniendo en marcha. Con esto al distrito 1 le destinaremos un presupuesto del 29  y, por ejemplo al 3,  un  24 %", señaló. 

Frente a la distribución de los presupuestos, la edil Emily Vera invitó a sus compañeros a recorrer el distrito 2 para socializar el presupuesto y lo que se prevé hacer en obra pública. "El distrito 2 es uno de los que tiene mayor desigualdad  en toda la ciudad, por eso es nuestro deber socializar el presupuesto que tenemos a los barrios. Los invito a que brindemos una nueva pedagogía de la ciudad para que la gente sepa qué está haciendo y qué se hará. Es vital que la gente se empodere de sus derechos", señaló.

El concejal Manuel Romero, que representa a las zonas rurales, pidió que en ese presupuesto del distrito 3 se incluya en obras a las parroquias.  "Gracias a ellos, a la gente que las integra estos aquí. Por eso solo pido que en esa regeneración que se pretende hacer, llegue a todas ellas también", indicó. 

Durante la Sesión, asimismo otra sugerencia que por años ha venido dando la ciudadanía y los urbanistas frente a la situación del vendedor informal en Guayaquil, fue tomada en cuenta. Los ediles aprobaron en segundo debate, por unanimidad, el proyecto de ordenanza que regula los planes pilotos que sirvan de incentivo a los trabajadores autónomos y comerciantes minoristas. Es decir , que en la ciudad se podrán hacer ferias o encuentros en los que los protagonistas serán precisamente este tipo de comerciantes.

“El año pasado leí precisamente en un reportaje de EXPRESO que una de las medidas para ordenar al comercio informal, recaía en convertir a espacios públicos inhabilitados o desolados en ferias que de jueves a domingo llenen de vida al entorno, y que en ellas quienes atiendan sean los vendedores. Eso se ha dado en Barcelona y Madrid, en España, y en París (Francia) y los resultados han sido maravillosos. Que al fin podamos ver esto en la ciudad, además de bonito, será una gran oportunidad para esta gente que requiere trabajar y da un servicio”, señaló Lucas Rodríguez, habitante de la cuarta etapa de la Alborada.