Una llamada anónima al Ecu 911, alertando de una bomba en el hospital Abel Gilbert, en el suburbio de Guayaquil, alertó a los familiares de los pacientes que allí permanecen internados. Afortunadamente, aquella información fue falsa.

El coronel Christian Mayorga, jefe policial del distrito Portete, indicó que agentes del Grupo de Intervención y Rescate (GIR) llegaron a la casa de salud para inspeccionar todas las instalaciones, pero no encontraron algún objeto sospechoso.

"Específicamente, en la llamada decían que había una bomba en el piso 3. Por eso nos preocupamos de este piso, pero sin embargo las unidades hicieron una revisión total del hospital", dijo.

A los parientes de quienes permanecen asilados se les impidió el ingreso por aproximadamente una hora. Una parte del personal también salió del centro médico. Ahora todo se mantiene con normalidad.

La advertencia en este hospital ocurre un día después de que la unidad judicial que está junto al centro comercial Albán Borja, en el norte de la ciudad, se encontraran nueve tacos de explosivos, que fueron desactivados por agentes especializados.