En la avenida Casuarina, noroeste de la ciudad, a la altura de la Unidad de Policía Comunitaria (UPC), una alcantarilla, cuya tapa está levantada, se ha convertido en un basurero donde habitan roedores e insectos que están invadiendo las viviendas cercanas.

Los vecinos del sector dicen estar preocupados por esta situación. "No sabemos a qué entidad acudir para que solucionen este inconveniente que lo tenemos desde el año pasado", indica Julieta Terán, quien habita a dos cuadras del problema.

La denunciante señala que personas de otros sectores llegan al lugar para depositar desde basura hasta animales en estado de descomposición. "No se soportan los malos olores a causa de los desechos. Nos preocupa también la cantidad de ratones y cucarachas que habitan en esa alcantarilla y que con las lluvias salen del hueco y causan malestar a quienes transitan por la zona", añade Carlos Veloz, otro residente.

Indica que esto ha incrementado la insalubridad con la que ellos se ven obligados a vivir. "No es justo que tengamos que seguir soportando esto y ninguna autoridad nos escuche", concluye.