El US Open reafirmó este martes la intención de celebrar su edición de este año, pese a la reciente cancelación del torneo de Washington.

El ATP 500, que se iba a celebrar en la ciudad capitalina, anunció hoy su cancelación debido a los problemas externos que afectan al torneo como las inseguridades en los viajes internacionales y la creciente preocupación por la salud en los Estados Unidos debido al Covid-19.

Ante este manifiesto, el US Open expresó su apoyo a Washington, que iba a comenzar el 13 de agosto, y explicó que crearán un entorno “seguro y controlado” que mitigue los riesgos en los jugadores y en todas las personas implicadas en el torneo. A su vez confirmó que ellos sí echarán a rodar el Abierto el 31 de agosto, ya que una semana antes, el 22, será el Masters 1.000 de Cincinnati en las mismas instalaciones.

"Nuestras medidas han sido aprobadas por el estado de Nueva York y se adaptan a lo requerido por la ciudad de Nueva York y el Gobierno Federal", dijo el US Open en un comunicado.

Nueva York es el estado más afectado por la pandemia y acumula, hasta el momento, más de 400.000 casos de coronavirus y 30.000 muertes.