Moisés Caicedo, el ecuatoriano del Brighton de Inglaterra, había vivido unos días horribles, después de su fallado traspaso al Arsenal, equipo que no pagó los 100 millones de dólares que pedía el dueño de su pase.

Caicedo estaba suspendido de los entrenamientos y se temía que en su regreso a las canchas podría haber retaliaciones por parte de la hinchada.

Pero un día antes de que el Brighton le gane 1-0 al Bournemouth, el entrenador de Moisés, el italiano Roberto De Zerbi hizo una jugada fantástica: se dedicó a hablar del ecuatoriano y hasta pidió a la hinchada que lo apoyen.

“Les pido a los hinchas que apoyen, que no lo critiquen. Soy el único responsable de él, porque confío y creo en él”, expresó. Y eso fue lo que se vivió en el estadio.

Caicedo no entró de titular, algo que ya era incómodo para el compatriota, pero a los 57 minutos hizo su ingreso en el estadio Falmer. Y segundos antes se volvió a escuchar el cántico de los fanáticos del Brighton: “Caicedooo... Caicedoooo...”. Esa era la mejor señal de que los seguidores del equipo inglés habían perdonado a Moisés por expresar sus deseos de irse del club.

Las palabras del DT Roberto De Zerbi fueron profundas al expresar: “Necesitamos el juego de Moisés. Es un muchacho fantástico”.

Caicedo volvió a jugar con el Brighton y está en paz con la hinchada. Por ahora, la experiencia vivida por el volante le sirve de mucho para no despedirse antes de hora.

En el Brighton jugaron los tres ecuatorianos: Pervis Estupiñán estuvo desde el inicio y al cambio ingresaron Caicedo y Jeremy Sarmiento, ambos al minuto 57. Este último se mandó un pase fantástico que terminó en el gol de Kauro Mitoma para la fiesta del equipo de los tres compatriotas.