Antoine Griezmann, delantero del Atlético de Madrid, será baja en el partido de este sábado contra el Almería y es seria duda para el duelo de vuelta de las semifinales de la Copa del Rey contra el Athletic de la próxima semana, por el esguince de tobillo de grado moderado sufrido ante el Inter y detectado este miércoles en las pruebas médicas.

El futbolista se dobló esa articulación en el minuto 77 del encuentro de ida de este martes de los octavos de final de la Liga de Campeones contra el conjunto italiano en el estadio de San Siro, fue cambiado un minuto después por Ángel Correa y fue atendido por los servicios médicos del club en el mismo banquillo, en el que le colocó un vendaje.

"Antoine se había doblado el tobillo y esperemos que sea una torcedura de tobillo. El tobillo es noble, como decía un entrenador", expresó Diego Simeone, su entrenador, al término del encuentro, aunque las pruebas médicas determinaron que su dolencia va más allá de una simple torcedura, una vez que sufre un esguince que lo pone en duda en un tramo decisivo de la temporada, con la Copa del Rey, la Liga de Campeones y LaLiga EA Sports en disputa.

El parte médico del club no indica el periodo de recuperación estimado, que en este tipo de lesiones suele rondar entre las dos y las cuatro semanas, y se limita a señalar que "queda pendiente de evolución", aunque se perderá ya el duelo de este sábado en LaLiga EA Sports contra el Almería y trabajará en su recuperación contrarreloj y difícil para el choque de las semifinales de la Copa del Rey ante el Athletic, dentro de una semana.

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