Dejar de hacer lo que más amas es durísimo, pero tres de cuatro casos visibles de jugadores en Ecuador que han tenido problemas con el corazón han dejado las canchas. El tema ha vuelto a escena, después de que se revivió el tema de Joao Paredes, el jugador que no pudo firmar su contrato con Mushuc Runa y ahora se quedó sin carrera deportiva a sus 25 años.

Tener enfermedades en el corazón apareció en el fútbol ecuatoriano en 1997, cuando un médico del equipo Espoli observando unos exámenes, encontró que el delantero, Pedro Mauricio Muñoz tenía un soplo en el corazón y que debía dejar de jugar el fútbol. Pero el Potro, que ahora labora en la selección nacional, fue más un susto médico que del jugador.

En el 2007, se dio con el volante Jerson Stacio, campeón con D. Cuenca en el 2005 y que por tener una arritmia cardíaca dejó el fútbol, cuando estaba en Aucas.

Otro caso fue el del jugador Álvaro Carcelén, en el 2010 en Independiente del Valle, pero sufrió un desmayo, hasta ese momento, él no sabía que tenía, pero se determinó que era una arritmia cardíaca y tuvo que dejar el fútbol. Ahora es entrenador en las menores de los Rayados.

Muñoz que de los cuatro casos es el que siguió jugando le contó a EXPRESO qué mismo pasó. “Yo sabía que tenía un soplo en el corazón, en varios equipos donde estuve, en los exámenes médicos determinaron mi problema, pero yo seguí jugando, en realidad se hizo una bomba, cuando llegué a Espoli, el médico pensó que yo no lo sabía, pero seguí jugando por varios años más”, expresa Muñoz.

El exjugador comentó que nunca sintió problemas, pero que el tema de Stacio, Carcelén y Paredes es diferente y preocupante, debido a que a vida está en juego.

“Lo triste de todo esto es que uno como jugador le pone el corazón para estar en una carrera tan linda, pero es el mismo corazón que te pide que salgas para seguir con vida”, comentó Muñoz.

Stacio le contó a EXPRESO que empezó a sentir estos dolores “en una práctica”. “Tuve un dolor en el pecho y en el brazo, luego sufrí un desmayo, pensé que me iba de este mundo”.

“Es una decisión súper difícil, pero toca pensar en la familia, en los hijos. La vida sigue, a pesar de las dificultades. Estaba en toda la etapa cuando un jugador alcanza la madurez deportiva y profesional. Pretendía jugar más tiempo. Ahora practico deporte a bajo nivel y a manera recreativa”, agregó Stacio.

Para el médico Eulogio Vera, de LigaPro, este tema es delicado: “La dirección de salud de LigaPro ha sugerido que Joao Paredes no juegue en el alto rendimiento por su problema cardíaco. Cuando conocemos de alguna patología de algún deportista, procedemos de oficio con el club y pedimos la ficha médica, luego convocamos a un tribunal médico para que emita una recomendación y finalmente emitimos una recomendación”, lo dijo en radio La Red.