El Bayer Leverkusen de Xabi Alonso prosiguió su alto vuelto en la Bundesliga y goleó este sábado 30 de septiembre a domicilio por 0-3 al colista Mainz 05 en un partido en el que no brilló mucho y en el que en algunos pasajes tuvo muchas dificultades pero que el final liquidó a base de oficio y efectividad.

La primera llegada del Leverkusen terminó en la red. Jeremy Frimpong le había ganado la espalda a la defensa del Mianz en la banda derecha y lanzó un centro que buscaba a Victor Boniface y el defensa Sepp Van der Berg terminó marcando en propia puerta al intentar interceptar.

Hasta ese momento, ya se jugaba el minuto 18, el Leverkusen había tenido muchas dificultades ante un rival que lo superaba con frecuencia en los duelos individuales por el balón.

El Leverkusen tenía la pelota pero tenía dificultad en generar llegada y el juego se realizaba más cerca de la raya central que del área del Mainz.

Al final de la primera parte la hoja de estadísticas mostraba una clara ventaja del Leverkusen en cuanto a posesión de pelota -un 60 por ciento- pero en cuanto a disparos a dirección a puerta el Mainz iba por delante 5 a 1.

Incluso después del gol en propia puerta el Mainz tuvo dos buenas llegadas: un cabezazo de Onisiwo en el 24 y un remate desde fuera del área de Druda en el 30 que tuvo que manotear el meta Lukasz Hradecky.

La segunda parte comenzó con una tónica similar a la que había caracterizado la primera y en el 54 el Mainz tuvo incluso una buena ocasión para empatar con un remate de cabeza de Onisiwo que Hradecky tuvo que desviar a saque de esquina.

Sin embargo, el Leverkusen encontró el segundo en el 58 con un gol de falta de Grimaldo. Era el segundo remate del Leverkusen. El tercero, en el 65, también terminó en la red.

La jugada empezó con un desborde por la izquierda de Adli que tiro el pase de la muerte para que Jonas Hoffmann marcase dentro del área de pierna derecha.

Ya el segundo gol había sido prácticamente la sentencia y el tercero terminó por desinflar al Mainz que el final no pudo sacar provecho del buen trabajo que había hecho en la primera parte.

Incluso el cuarto gol para el Leverkusen estuvo cerca. Lo tuvo Boniface en el minuto 75 cuando enfrentó sólo al meta Robin Zentner pero perdió el mano a mano.

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