En el ámbito de la construcción durante la pandemia se escuchó de todo, a unos les fue bien y a otros los dejó un poco débiles.

José Solines Aguayo, actor clave en la construcción, con más de tres décadas de profesionalismo contó su experiencia.

¿Los proyectos inmobiliarios en Guayaquil parece que decayeron en ciertos sectores, pero a excepción de la vía a la Costa?

Efectivamente, la expansión de Guayaquil va hacia la vía a la Costa, no hay otro polo para desarrollarse. aunque la gente prefiera Samborondón por los servicios.

¿Hay ciertos insumos que no se encuentran aquí, sino en países vecinos como Colombia, se dice que los constructores celebran que una de las primeras acciones del presidente Guillermo Lasso fue visitar al mandatario colombiano Iván Duque, el gobernante le pidió ayuda para ingresar al bloque comercial de la Alianza del Pacífico?

En Europa y China también hay materiales económicos, pero el flete hace que estos suban su precio. Nosotros trabajamos con empresas ecuatorianas que tienen buena calidad en sus productos.

¿Qué nos podría decir de los propósitos marcados para esta reactivación económica?, ¿existe un enfoque estratégico de la compañía?

Nos reinventamos. Antes construía casas grandes, ahora tenemos residencias más pequeñas con un dormitorio, hasta 3, depende de las necesidades del cliente. Nuestra alícuota es baja. Hacemos cosas nuevas. Buscamos al cliente por diferentes plataformas. Les damos más facilidades de pago. Sin embargo, hay un freno en el tema comercial que se siente por asuntos políticos.

En estos tiempos, ¿cuál es el principal desafío?

Brindar un buen precio y hacer que el cliente se sienta bien, porque un cliente agradecido nos hace propaganda, no cobro penalidades y ese es uno de los motivos por los que Dios me bendice y hace avanzar. Cumplo con el cliente y con mi conciencia.